Boston Celtics tuvo una era gloriosa durante la década de 1980, debido a los tres campeonatos conseguidos en 1981, 1984 y 1986. Y en gran parte tuvo que ver con Larry Bird, quien se convirtió en una leyenda de la franquicia por los logros colectivos e individuales. Entre sus conquistas se encuentran dos premios al MVP de las Finales (1984 y 1986), tres al Jugador Más Valioso de la temporada (1984 a 1986), doce convocatorias al All Star Game (1980 a 1988, y 1990 a 1992, MVP en 1982), nueve inclusiones en el Mejor Quinteto (1980 a 1988) y dos apariciones en el club de los 50-40-90 (1987 y 1988).
Sin embargo, el oriundo de French Lick, Indiana, tomó la decisión más difícil, unas semanas después de cosechar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. El 18 de agosto de 1992, comunicó en una conferencia de prensa que iba a colgar las zapatillas para ponerle un punto final a su carrera de 13 años como jugador. Su debut en la NBA fue en 1979.
“Este no es un día triste. Es un día emotivo, pero no un día triste. Estoy entusiasmado de comenzar una nueva vida, pero voy a extrañar esta vida”, expresó Larry Bird entre lágrimas.
Kodak, uno de sus apodos, tuvo un desenlace complicado de su carrera como jugador, a raíz de los constantes problemas en la espalda. En el verano estadounidense de 1991 se tuvo que operar, lo que le permitió jugar apenas 45 encuentros de la fase regular 1991-92. Es más, en la campaña 1988-89 llegó a estar presente en apenas nueve partidos del torneo.
“Los últimos dos años han sido muy duros para mí, para la espalda y para el cuerpo. Fue muy difícil lidiar con eso, día tras día”, afirmó Bird en la conferencia de prensa.
Por su parte, Red Auerbach, un símbolo de la historia de Boston Celtics, le dedicó unas palabras a The Hick from French Lick. “Podría seguir hablando de él durante horas. Pero recuerdo que cuando vino aquí hace 13 años, parecía un patán del campo. Pero cuando lo mirabas y mirabas a su ojos, sabías que no estabas hablando con ningún tonto. Él sabía lo que quería y sabía lo que se necesitaba para llegar allí. No había nadie más motivado”, comentó el aquel entonces Presidente de Operaciones de la franquicia.
También, el mundo de la NBA hizo eco de la partida de una leyenda del conjunto de Massachusetts. “Simplemente. Larry Bird ha ayudado a definir la forma en que una generación de fanáticos del baloncesto ha llegado a ver y apreciar la NBA. En el futuro, los grandes jugadores serán juzgados según los estándares que él ha establecido, pero nunca habrá otro Larry Bird. Sé que millones de fanáticos se unen a mí en un sincero ‘gracias’ por todo lo que le ha dado al juego”, escribió en un comunicado el comisionado de la NBA, David Stern.
En tanto, el emblemático jugador y entrenador de Washington Wizards, Wes Unseld, dijo: “En cierto sentido, no quieres ver a un gran jugador retirarse porque no tendrás la oportunidad de verlo actuar nuevamente, y definitivamente era alguien a quien compraría un boleto para ver jugar a este juego. Por otro lado, estás feliz de ver a un jugador que ha tenido tanto éxito como Larry terminar su carrera con una nota alta y salir con los recuerdos que tenés de él como un gran jugador. Retirarse del baloncesto para Larry debería ser una celebración de su carrera. Y Larry Bird tiene mucho que celebrar”.
UNA NUEVA ETAPA
Una frase muy conocida cuenta que, cuando una puerta se cierra, otra se abre. Y eso ocurrió con el formado en la Universidad de Indiana State, el mismo 18 de agosto de 1992. A la par de haber anunciado su retiro, comenzó una nueva era como asistente de Dave Gavitt, en la oficina principal de Boston Celtics.
Durante cinco años, Kodak colaboró con el proceso de reconstrucción del conjunto de Massachusetts. De hecho, participó de las Loterías del Draft, presentándose como la imagen de la franquicia en el evento. Fue un tiempo en el que aprendió conceptos nuevos y se introdujo en un momento distinto.
Esta experiencia lo catapultó a ser el Presidente de Operaciones de Indiana Pacers. Pero antes, asumió el rol de entrenador en jefe del elenco de Indianápolis en 1997, dejando así de ser parte de la oficina comercial de Boston Celtics. El motivo de su cambio de cargo fue buscar un campeonato con el equipo de su ciudad natal. Además, el momento deportivo era el ideal debido a la evolución de Reggie Miller como figura del plantel y de la NBA.
En la temporada 1997-98, Larry Bird ayudó a que los de Indianápolis conquistaran el mejor récord de fase regular en su historia, con 58 triunfos y 24 derrotas. Por eso, fue elegido como el Mejor Entrenador del Año. En los Playoffs, dejaron en el camino a Cleveland Cavaliers (3-1) y a New York Knicks (4-1) para clasificarse a las Finales de Conferencia. Sin embargo, no pudo en el séptimo enfrentamiento de la serie con Chicago Bulls.
La campaña 1998-99 quedó marcada como la más corta de todos los tiempos, como consecuencia del Lockout. Indiana regresó a las Finales del Este tras 33 victorias y 17 caídas en la fase regular. Y en la postemporada, los Pacers barrieron a Milwaukee Bucks (3-0) y a Philadelphia 76ers (4-0). De todos modos, los Knicks se tomaron revancha del torneo anterior y los eliminaron por 4 a 2.
La tercera fue la vencida para la 1999-00. Los Pacers volvieron a quedar primeros en la División Central con 56 partidos ganados y 26 perdidos. Asimismo, superaron nuevamente en la primera ronda a Milwaukee (3-2) y en la segunda a Philadelphia (4-2). Después, se cobraron venganza de New York y los derrotaron por 4 a 2 para obtener su primer campeonato de la región. No obstante, cayeron en las Finales ante Los Ángeles Lakers por 4 a 2.
Luego, Larry Bird dejó de ser el entrenador de Indiana y pasó tres años sin actividad. En 2003, retornó al ruedo en la franquicia asumiendo como Presidente de Operaciones. De esta forma, tuvo la oportunidad de tomar decisiones importantes en el armado del equipo.
Entonces, fue el arquitecto de aquel roster de primer nivel que estuvo liderado por Paul George y Danny Granger. A su vez, había otro jugadores de calidad como George Hill, David West, Lance Stephenson y Roy Hibbert. Y con Frank Vogel como coach, el conjunto de Indianápolis se clasificó a dos Finales de Conferencia en 2013 y 2014. Sin embargo, el Miami Heat de LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh le dejó sin chances de un nuevo título del Este. Tres años después, Bird dejó su cargo de Presidente de Operaciones como producto de la desintegración de ese equipo.