Shawn Bradley fue uno de los jugadores más populares de la NBA en la década de los 90′. Era imposible de obviar a un hombre blanco que medía (mide) 2,29 metros. Fue el quinto profesional más alto que tuvo a la competencia. Para sorpresa de nadie, rápidamente se consolidó como un pivote capaz de anotar cerca del aro, agarrar rebotes y colocar bloqueos.
Bradley fue seleccionado con el segundo pick del Draft de 1993 por Philadelphia 76ers. Jugó dos temporadas y media en la franquicia del estado de Pensilvania hasta que fue enviado a los New Jersey Nets. Allí pasó un año y medio hasta su arribo a Dallas Mavericks. La mayor parte de su trayectoria, nueve de sus 12 años en la competencia, fueron junto a la organización texana.
Junto a este último se ganó la mayor popularidad. Firmó 582 partidos (Top 10 de los Mavs) entre los que cosechó 1063 rebotes ofensivos (6°); 2277 rebotes defensivos (6°); 3340 rebotes (4°) y 1250 bloqueos (2°). Además, con un total de 248 bloqueos fue el líder en el rubro en la 1996-97.
EL HISTÓRICO TRIPLE-DOBLE DE SHAWN BRADLEY
Su mejor noche también llegó junto a los Mavericks. Un triple-doble histórico, tan único como poco recordado. El 7 de abril de 1998 firmó una planilla única: 22 puntos, 22 rebotes y 13 bloqueos para un triple-doble en la derrota ante Portland Trail Blazers (99-91). Fue la sexta triple-decena con mayor cantidad de tapas en la historia de la competencia.
Lo de Shawn Bradley fue tan único que resulta sorpresivo que su producción no haya acabado en un festejo texano. Apareció desde el banco en una campaña para el olvido y se esperaba un partido normal de su parte. Si bien estuvo flojo desde el tiro de campo (6/15), cosechó cada uno de sus 10 tiros libres. Además, cinco de sus 22 rebotes fueron ofensivos.
Dallas llegó a perder por 51-41 a la hora del entretiempo y compitió hasta donde pudo de la mano de su pivote. Michael Finley anotó 24 tantos, pero la falta de acompañamiento impidió el festejo.
Portland se impuso principalmente porque tuvo más herramientas ofensivas. Isaiah Rider (26) encabezó el goleo de un elenco que tuvo a cuatro jugadores con un mínimo de 16 puntos. Por su parte, Kelvin Cato, que padeció a Bradley toda la noche, acabó con 16 unidades y 12 rebotes.
Pese a la derrota, el total de 13 bloqueos se mantuvo como la mayor cantidad registrada por cualquier jugador de los Mavericks en un encuentro de fase regular. Un récord al cual el mismísimo Dirk Nowitzki no se pudo ni acercar.