El ex jugador de la universidad de Kentucky, Isaac Humphries, se declaró gay.
“Durante toda mi carrera, no existía una realidad en la que pudiera ser un hombre abiertamente gay mientras jugaba baloncesto”, escribió. “Hasta ahora.”
Humphries creció en Australia, donde, explicó, que le resultaba difícil salir del armario. Fue a una escuela secundaria privada solo para hombres y escribió que no podía ser parte de una comunidad LGBTQ+. El alero jugó baloncesto universitario en los Estados Unidos y pasó dos temporadas con Kentucky, de 2015 a 2017, y logró disputar 61 partidos para los Wildcats durante esas dos temporadas.
Sin embargo, en 2013, el ex jugador de la NBA Jason Collins fue el primer atleta abiertamente gay en una de las cuatro principales ligas deportivas de América del Norte cuando lo hizo público al final de su carrera.
Desde que dejó Kentucky, Humphries ha estado en varias de las ligas de baloncesto de todo el mundo. Su único año en la NBA fue durante la temporada 2018-19, cuando jugó para los Hawks y el equipo G League de Atlanta, conocido como Erie Bayhawks. Actualmente juega en el Melbourne United de la NBL.
“En Los Angeles, fue completamente diferente. Estuve rodeado de algunas de las personas más exitosas del mundo, desde músicos, productores de cine y televisión, personalidades de los medios, celebridades de primer nivel, y pude ver que ser abiertamente gay puede traer alegría”, escribió.
“Por primera vez en mi vida, vi que las personas en la cima de su juego pueden ser abiertas y honestas acerca de quiénes son, y eso vino con una felicidad visceral y contagiosa”.
Humphries cerró escribiendo que espera que su decisión ayude a que sea más fácil para otros hacer lo mismo en su deporte.
“Sé lo que se siente crecer en un ambiente que no se siente acogedor. Por ello quiero hacer mi parte para asegurarme de que el baloncesto ya no sea uno de ellos.”
La NBA, por su parte, emitió un comunicado tras el anuncio de Humphries.
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— NBA (@NBA) November 15, 2022
“Pueden ser quién quieran ser y ser gays. La sexualidad no debe determinar qué deben hacer. Ese es mi propósito en la vida”, un mensaje lleno de fuerza, lleno de orgullo, que seguramente ayude y sea ejemplo para muchos otros jugadores y deportistas.