Los Kings contaron con siete logos a lo largo de su historia, la cual estuvo marcada por cuatro mudanzas. Nacidos en Rochester y actualmente localizados en Sacramento, tienen el hito de ser los primeros campeones de la NBL, liga predecesora a la NBA, en 1946. Además, cuentan con un anillo de campeones de la liga en 1951, cuando ocurrió su segunda edición.
No obstante, tras semejante inicio auspicioso, la franquicia no pudo estar a la altura de las grandes expectativas iniciales. Apenas 26 apariciones en Playoffs durante los siguientes 73 años de existencia, un 35% en las campañas siguientes. A su vez, el equipo no pudo volver a clasificar a la postemporada desde 2006. Una racha de 16 años de sequía, la más larga de la historia del certamen.
EL INICIO: ROCHESTER ROYALS (1923-1957)
Sacramento también tiene el honor de ser la franquicia estadounidense más antigua en mantenerse en funcionamiento. La organización fue fundada por los hermanos Jack y Les Harrison en 1923, cuando ambos también eran jugadores del equipo. Si bien inicialmente se trataba de un equipo amateur, los co-propietarios se organizaron para conseguir sponsors que les permitan jugar de manera semiprofesional. En una época marcada por el juego únicamente por placer, el conjunto basado en Rochester, Nueva York, tenía una gran ventaja.
Tras 22 años de actividad, el par de hermanos se dedicó estrictamente a formar una franquicia que apuntaba a ser la más exitosa de todo Estados Unidos. Rochester Royals, tal y como se lo conoció al equipo, utilizó dos estadios antes de su traslado a Cincinatti. Primero actuó de local en Edgerton Park Arena (1949-1954), luego en Rochester War Memorial (1955-1957).
El primero logo de los Kings -en este caso Royals- surgió en 1945, cuando fue uno de los equipos fundadores de la NBL. Como su apodo hacía referencia a la realeza, la insignia presentó un escudo común a aquella época con tres picos en sus puntas superiores que referían a la parte superior de una corona. A su vez, el nombre de Royals aparecía en una banda, similar a la que usaban los altos cargos jerárquicos de la sociedad.
Lester Harrison fue el entrenador del único equipo de la organización que logró ser campeón. El dueño y entrenador contó por aquel entonces con Bob Davies, quien cerró su carrera dentro del salón de la fama. El base promedió 15,2 puntos, 5,1 asistencias y 3,2 rebotes durante aquella histórica campaña de 1950-51. A su vez, Les contaba con Red Holzman entre sus piezas del banco.
CINCINNATI ROYALS (1957-1971)
Los Royals se mudaron a Cincinnati en 1957, dos años antes que los hermanos Harrison vendan la franquicia a Thomas Woods. La falta de éxito en sus últimas dos campañas en Rochester los llevó a considerar relocalizar la franquicia en la ciudad del estado de Ohio. Allí no había otro equipo, a diferencia del estado de Nueva York, que contaba con los Knicks.
Tras la mudanza llegó un nuevo logo para los Royals (hoy Kings). Un rey con una cara que tenía forma de pelota de básquet y que observa hacia arriba para ver dos cosas. Primero, su corona, dejando en claro su posición de rey. Luego, la representación de la ciudad de Cincinnati a través de sus edificios. Entre ellos se puede distinguir, a la derecha y con forma puntiaguda en su parte superior, la representación del Fourth and Vine Tower. Este edificio fue construido en 1913 y era el quinto más alto del mundo (151 metros de altura). El mayor fuera de Nueva York como Filadelfia.
Lo que no lograba estar tan alto era el nivel del equipo. Si bien el equipo volvió a Playoffs en su primera temporada en la nueva ciudad, debió pasar los siguientes tres fuera de la postemporada. La llegada de los 1960s estuvo marcada por el cambio de dueño como el arribo de Oscar Robertson, quien fue seleccionado con el pick territorial del Draft 1960. Mr. Triple-Double jugó en los Royals hasta 1970 y fue MVP de la fase regular en dos ocasiones (1963 y 1968).
Durante ese período, la organización clasificó a siete de las diez postemporadas y rozó una aparición en las finales de 1963. Cayó en la definición regional ante los Boston Celtics (4-3). Una lucha por el anillo se hizo imposible al compartir conferencia con dos de los tres elencos más duros de la liga por aquel entonces: Celtics y Sixers.
EL SEGUNDO LOGO DE LOS CINCINNATI ROYALS (1971-72)
Los Royals cambiaron su logo para la temporada 1971-72. Ya sin Oscar Robertson (enviado a Milwaukee Bucks y campeón con la organización de Wisconsin), encaró su nueva etapa con una nueva insignia. Un ícono dividido por una corona en rojo que contó con el apodo del equipo. Por debajo de esta, la parte baja de una pelota de básquetbol de color azul. Estos fueron los colores que adoptó la franquicia por aquel entonces.
A pesar del rebrand, esto se dio en el último año de la organización en Cincinnati. Una marca de 30-52 marcó lo que por aquel entonces fue su tercera peor temporada en la NBA. Luego el dueño, Thomas Woods, decidió relocalizar a la organización en Kansas City.
KANSAS CITY-OMAHA KINGS (1972-1975)
Si bien la franquicia se trasladó a Kansas, actuó de local en Omaha en varias ocasiones durante sus primeros años mientras esperaba que se complete la construcción del Kansas City Municipal Auditorium. Así, la organización llevó el nombre de ambas ciudades.
El primer logo fue básicamente el mismo, aunque presentó el cambio de apodo lógico de Royals a Kings. A su vez, por debajo de la pelota se podía observar el nombre de ambas ciudades en forma arqueada.
Las tres temporadas fueron complicadas, pero lo mejor llegó para la 1974-75. El equipo fichó a Phil Johnson, quien ganó el premio al mejor entrenador del año. ¿Por qué lo hizo? Mejoró el récord del año anterior en 11 triunfos para pasar de un 33-49 a un 44-38. Esto hizo posible el regreso a los Playoffs después de nueve años. La eliminación por 4-2 a manos de los Chicago Bulls fue un por menor.
KANSAS CITY KINGS (1975-85)
Tras concluirse la construcción del Kemper Arena, la franquicia se estableció definitivamente en Kansas, aunque hizo unas leves apariciones en Omaha hasta 1978. El logo de los Kings retornó a la forma que tenía en su etapa en Cincinnati, con colores más vivos y el nombre de la ciudad por encima de la corona.
El período de diez años acabó siendo peor de lo esperado. Tras el regreso a Playoffs, Johnson no pudo repetir el hito en ninguna de las tres temporadas siguientes antes de su despedida.
El cargo lo tomó Cotton Fitzsimmons, que hizo un estupendo trabajo en su primera aparición: récord de 48-34 para ser el segundo mejor de la conferencia en la 1978-79. La marca le dio la posibilidad de quedarse con el premio al entrenador del año, mientras que Phil Ford ganó el galardón al novato del año. Lo que nadie esperaba fue la catástrofe en la primera ronda: 1-4 ante los Phoenix Suns, que habían llegado como el underdog.
Tras la ampliación de los cupos para Playoffs en la 1979-80, Kansas esperaba un mejor desempeño pero fue nuevamente eliminado por Phoenix. No obstante, la revancha llegó en 1981, cuando el equipo sorteó a Portland Trail Blazers (4-3) y sus viejos verdugos Suns (4-3) para volver a las finales de conferencia. La primera aparición en la instancia en 17 años acabó con un revés a manos de los Houston Rockets por 4-1.
La afición esperaba una posibilidad de revancha en la siguiente campaña, pero esto estuvo lejos de suceder. Kansas traspasó a su mejor jugador, Otis Birdsong, a New Jersey Nets para la llegada de Cliff Robinson. Lo curioso es que este luego de seis meses fue enviado a Cleveland Cavaliers a cambio de Reggie Johnson. A su vez, la salida de Birdsong impulsó la de Wedman a la franquicia de Ohio. El equipo también perdió a tres jugadores por retiro, entre ellos el icónico Jo Jo White. Por último, el mal inicio de la campaña llevó a la partida de otros dos finalistas: Sam Lacey y John Lambert.
Sin siete de sus doce piezas de aquel plantel, Kansas cavó su propia tumba. Fue el tercer equipo menos acompañado de la liga y entró en un duro período de reconstrucción. Tuvo una leve aparición en Playoffs en una de las siguientes cuatro temporadas. Finalmente, se mudó a Sacramento al culminar la 1984-85, tras la compra de Gregg Lukenbill y Joe Benvenuti.
EL PRIMER LOGO EN SACRAMENTO (1986-1994)
La llegada a Sacramento se dio con un nuevo cambio de logo para los Kings, aunque con una modificación leve respecto de sus predecesores. La insignia adoptó el nombre de la ciudad, mientras que la corona adoptó una tonalidad más rosada. Esta mixtura se hizo visible en las primeras musculosas que utilizó la organización en su arribo a California.
Phil Johnson volvió a la franquicia para 1985 y concretó la vuelta a Playoffs en 1986, durante el primer año de la organización en Sacramento. Pero tras este año el equipo se vino cuesta abajo. Llegó a contar con Bill Russell como entrenador y jugadores de alto calibre como Kenny Smith, Danny Ainge, Spud Webb o Mitch Richmond. Sin embargo, el plazo que comprendió entre la 1986-87 y 1993-94 tuvo una constante: ausente en la postemporada.
EL PRIMER GRAN CAMBIO EN AÑOS (1994-2016)
Jim Thomas compró la franquicia en 1992 y entendió que el rebranding era algo inevitable. Más allá de por menores, el logo de los anteriores Royals y por entonces Kings eran prácticamente idénticos. La renovación vino con un logo muy atractivo, marcado por la presencia de la histórica en corona en gris por encima del apoco de la franquicia. Al fondo se pueden observar dos espadas cruzadas, que marcan la intencionalidad de ser guerreros, mientras que en la parte inferior entre las dos herramientas se pueda observar una pelota de básquetbol. Todo marcado por tonalidades de violetas, grises y negros, que acabaron siendo los colores de las musculosas de la organización.
Si bien Sacramento debió esperar hasta fines de los 90s para reencontarse con los mejores momentos, estos llegaron de la mano de Rick Adelman; curiosamente tras la compra de George, Joe and Gavin Maloof en 2013. La franquicia reunió talento en cartas fuertes como Vlade Divac, Chris Webber, Mike Bibby, Jason Williams, Peja Stojakovic, Doug Christie, Hedo Turkoglu y Gerald Wallace. Logró una racha de ocho clasificaciones consecutivas a Playoffs entre 1998 y 2006, la segunda racha más larga de la historia de la franquicia.
El punto más alto llegó con uno de los momentos más controversiales de la liga. En la temporada 2001-02, Sacramento se posicionó como el mayor candidato a desbancar a los Lakers de Shaquille O’Neal y Kobe Bryant. Firmó una marca de 61-21 para ser el mejor de la fase regular y se encontró con el combinado angelino en las finales de conferencia tras sortear con facilidad a Jazz como Mavericks. Fue una serie muy pareja en la que llegó a estar 3-2 y hasta tuvo la posibilidad de finiquitar ante su gente. Sin embargo, varios cobros dudosos por parte de los jueces y un claro favoritisimo hacia el grande, además del enorme talento de su plantel, conspiraron en contra de los Kings, que cayeron en siete encuentros.
Desde entonces, las lesiones jugaron en contra de las aspiraciones del equipo de Adelman. El equipo no pudo volver al nivel de aquella definición del oeste para tener su posibilidad de revancha. Dos eliminaciones en semifinales de conferencia y otras dos en la ronda inicial marcaron el desenlace de dicha era. El 5 de mayo del 2006 disputó su último juego de Playoffs.
Las apariciones de Tyreke Evans (2009) y DeMarcus Cousins (2010) invitaron a pensar que la reconstrucción finalizaría pronto. Sin embargo, una interminable sucesión de problemas internos entre dirigentes, entre dirigentes y entrenadores, y hasta con los jugadores, además de muchas lesiones, impidieron que el equipo despegue. Tras aquella eliminación a manos de San Antonio y hasta 2016 no hubo una campaña en la que Sacramento supere el décimo puesto del oeste.
EL LOGO DE LOS KINGS (2016-ACTUALIDAD)
Los Kings impulsaron la construcción de un nuevo estadio a inicios de los 2010s, cuando Vivek Randive compró la franquicia. Los californianos coquetearon con trasladarse a Seattle, pero tras la negativa optaron por tener nuevas instalaciones. Así, con la llegada del Golden 1 Centre también tuvieron un nuevo logo.
La última y actual insignia de los Kings combina los distintos diseños a lo largo de casi 100 años de historia. Por un lado mantuvo los colores violaceos, grises y negros de la mejor época en la contemporaneidad. Por otro lado, volvió a un formato similar al diseño que tenía como Royals en sus primeros años en Sacramento. La corona aparece en violeta, mientras que la parte inferior de la pelota aparece en gris. Esta vez sin el nombre de la ciudad, aunque con la corona posicionada sobre el apodo de la organización.
El nuevo logo de los Kings llegó con el último año de DeMarcus Cousins, quien partió a New Orleans en un traspaso a mediados del 2017. De la mano de Dave Joerger, y en el segundo año del prometedor De’Aaron Fox, llegó lo mejor de la última época. Un noveno puesto con marca de 39-43, lejos del octavo Los Ángeles Clippers (48-34), pero como una señal positiva de haber finalmente encontrado el camino.
Sin embargo, la turbulencia interna constante de los Kings se cobró a Joerger y con ello llegó un nuevo período de desequilibrio en Sacramento. No logró pasar del 12° puesto hasta 2022, dejó ir a otro jugador prometedor en Tyrese Haliburton y hasta dudó de dejar ir a Fox.