La carrera de Larry Bird como jugador tuvo de todo. Fue una de las principales figuras del básquetbol universitario en Indiana, como también un emblema de los Boston Celtics. Entre su debut en la NCAA en 1976 y su retiro en 1992, el oriundo de French Lick fue una de las caras más buscadas. De los jugadores más dominantes de su era junto a Magic Johnson y luego Michael Jordan.
La trayectoria incluyó de todo. Fue tres veces campeón de la NBA, dos veces seleccionado como MVP de las finales y elegido como MVP en tres oportunidades. También tuvo doce presencias en Juegos de las Estrellas; diez en los quintetos ideales de las temporadas y tres presencias entre los cinco mejores defensores del certamen. Además, en su carrera universitaria, fue el mejor del país en una ocasión y estuvo entre los mejores en dos oportunidades. Dejó una huella tan significativa que indiscutiblemente estuvo (y está) entre los diez jugadores más destacados de la historia.
Tras un análisis minucioso, BA Ball te propone un viaje. Un recorrido por el Top 10 de momentos en la carrera de Larry Bird.
1-SU ÚLTIMO AÑO UNIVERSITARIO (1978-79)
Larry Bird aceptó una beca para jugar en la Universidad de Indiana tras completar sus estudios secundarios. El oriundo de French Lick era muy tímido y se sintió avasallado por el enorme campus del instituto. Dejó la escuela, volvió a su casa, trabajó como basurero y aceptó una oferta de Northwood Institute. Sin embargo, acabó en Indiana State ya que tenía un talento natural para jugar al básquetbol.
Allí pasó tres años, pero su mejor llegó en la temporada 1978-79. Esto se dio incluso después de ser drafteado con el sexto puesto de 1978 por los Boston Celtics. El alero optó por jugar un año más en el plano universitario antes de dar su salto a la NBA.
Su equipo no era considerado de los mejores, pero tuvo una campaña de ensueño. Bill Hodges asumió el puesto de entrenador tras su fugaz paso por la Universidad de Duke y lideró al equipo a un 33-0. Bird promedió 28,6 puntos, 14,9 rebotes, 5,5 asistencias y 2,5 robos entre las 34 apariciones. A pesar de registrar su marca más baja de goleo entre sus tres años universitarios, Bird complementó ese fuego ofensivo con un despliegue de recursos memorable. Tal es así que el sitio web Bleacher Report considera que fue la tercera mejor presentación de cualquier jugador en una temporada en el plano estudiantil.
Indiana State llegó a la final del torneo de la NCAA, donde enfrentó a Michigan State de Magic Johnson. El partido más visto de la historia quedó en manos de quien luego jugaría en los Lakers, pero eso no eclipsó a Larry. Ganó todo tipo de premios incluyendo el Oscar Robertson Trophy, premio otorgado por la NCAA al mejor jugador del año.
2-EL NOVATO MEJOR PAGO DE LA HISTORIA (1979)
Después de su éxito en Indiana State, inició la negociación para su llegada a los Boston Celtics. Su agente, Bob Woolf, tenía en claro que era una de las caras más buscadas del país. Así, desechó varias ofertas por parte de Red Auerbach, por aquel entonces gerente general de la organización. El dirigente respondió públicamente a la postura del representante. Mencionó que él no le ofrecería más dinero que a cualquier otro integrante de la franquicia.
La negociación fue muy tensa. El mismo Woolf deslizó la posibilidad de rechazar todo contrato y llevar a Bird al Draft de 1979, donde sería elegido con el número 1. Tras el tire y afloje, el 8 de junio de 1979 hubo acuerdo. Larry Bird firmó un vínculo de 3.25 millones de dólares a cobrar en cinco temporadas. Fue una suma menor a la que se acuerda en la actualidad, pero aquel día se convirtió en el novato mejor pago de la historia.
3-PRIMER TÍTULO NBA (1981)
Larry Bird ganó tres anillos entre sus 13 años en la NBA y sólo en uno no se hizo con el MVP de las finales. Sucedió en 1981, durante su segunda campaña en la liga. Pero, el primer título siempre tiene un gustito especial.
Boston firmó una marca de 62-20 para hacerse con el número 1 del este en la fase regular. Dominó a Chicago Bulls (4-0) en semifinales de conferencia para medirse con el otro candidato, Philadelphia 76ers (62-20 en fase regular). Fue una de las series de finales del este más atractivas, que terminó en un séptimo partido para tener a su ganador.
Aquel asalto definitorio se jugó en la noche del 3 de mayo de 1981. Un partido muy parejo que quedó en manos de Boston por 91-90. Larry Bird comandó al triunfo con 23 puntos y 11 rebotes, líder del equipo en ambos rubros. Además, anotó el tiro definitorio con un robo a Darryl Dawkins seguido de un contraataque coronado con un lanzamiento de media distancia a 1:03 del final. La defensa de Bird durante todo el encuentro fue vital para el festejo del elenco de Massachussets.
El rival de la definición fue Houston Rockets, al cual superó por 4-2. La serie no tuvo un claro dominador hasta el cuarto partido, el cual finalizó con un 2-2 y triunfos intercalados entre ambos equipos. Sin embargo, un gran trabajo defensivo en el quinto (109-80) dio el envión para coronar el sexto (102-91). Cedric Maxwell, quien promedió 17,7 puntos, 9,5 rebotes y 2,8 asistencias, además que frenó a Moses Malone, ganó el premio al jugador más destacado.
Bird no estuvo tan certero con el tiro (41,9% en la serie), pero comandó el triunfo que permitió el título. Anotó 27 puntos con un destacado 11/20 de campo y acompañó con 13 rebotes como cinco asistencias. Así, redondeó una definición en la que promedió 15,3 tantos y 15,3 rebotes en 42,8 minutos.
4-RÉCORD ANTE LOS PACERS (1983)
Larry Bird nació en el estado de Indiana, por lo que cada vez que enfrentó a los Pacers fue algo especial. Además, a partir de varios dichos en su contra, desarrolló una suerte de rivalidad con el equipo del estado. Esto luego no influiría en su decisión de sumarse como presidente de operaciones en 2003.
Una de las noches más recordadas sucedió el 30 de marzo de 1983. El alero lideró el 140-116 de los Celtics a los Pacers con 53 puntos. Tuvo una de sus noches más certeras con un 21/30 de campo y 11/11 en tiros libres. A partir de esta efectividad se dio el lujo de romper el récord de anotación de Herb Williams (51) en los Celtics durante un partido.
🗓 This Day in Stats, 1983: Larry Bird scores 53 against Indiana, his 1st of 4 career games with 50+ points – the most in @celtics history. pic.twitter.com/JQHViuyOE8
— StatMuse (@statmuse) March 30, 2019
5-LOS INOLVIDABLES PLAYOFFS DE 1984
Larry Bird llegó a su pico de rendimiento en 1984 y tuvo unos Playoffs memorables en los que lideró a Boston Celtics al título.
Inició a dejar su huella en la fase regular. Promedió 24,2 puntos, 10,1 rebotes, 6,6 asistencias y 1,8 robos en 38,3 minutos. Además, lideró a su equipo a una marca de 62-20 que fue la mejor de la liga. Trabajo más que meritorio del primero de sus tres premios al MVP de la temporada.
Boston no tuvo problemas con Washington Bullets (3-1) en la primera ronda de los Playoffs. Sin embargo, la historia fue muy diferente cuando enfrentó a New York Knicks. El equipo de la Gran Manzana le propuso una batalla de igual a igual de la mano de Bernard King, Ray Williams y Bill Cartwright, entre otros. Un duelo que terminó yendo a un séptimo encuentro.
A la hora de la verdad, no hubo nadie como Bird. El 13 de mayo de 1984 tuvo una de las mejores producciones individuales de la historia de los Playoffs. Boston venció 121-104 de la mano de un triple-doble memorable del alero. Firmó una performance de 39 puntos (13/24 de campo y 12/12 en tiros libres), 12 rebotes y 10 asistencias en 42 minutos. Fue el segundo jugador de la historia en registrar una triple decena en un juego de este calibre, el primero después de Jerry West.
La franquicia sorteó a Milwaukee Bucks en las finales de conferencia (4-1) para medirse con su archirrival, Los Ángeles Lakers. Una definición en la cual el elenco de Massachussets se encontró en aprietos tras hallarse 1-2 con el cuarto juego como visitante.
En ese escenario tan difícil, y tras arrancar la serie en un nivel menor al esperado, se destapó. Larry Bird comandó la victoria en tiempo suplementario por 129-125 durante la noche del 6 de junio de 1984 con 29 puntos y 21 rebotes. Además, anotó el tiro que terminaría siendo la victoria con un fadeaway tras una pérdida de Magic Johnson.
Ese fue el despertar de Bird, el envión que necesitaba Boston para hacerse con el título. El quinto asalto fue recordado porque el aire acondicionado no funcionaba en el estadio. Un juego que se disputó bajo 36 grados Celsius (97° Fahrenheit), el encuentro con mayor temperatura de la historia. Y en ese contexto nadie estaba más caliente que Larry: 34 puntos (15/20 de campo) y 17 rebotes. Él comandó el 121-105 que le dio la ventaja al dueño de casa.
Después, Boston cayó en su visita a Los Ángeles. Pero redondeó su coronación en el séptimo encuentro, esta vez ante su gente. Aquella noche del 12 de junio de 1984 acabó con un 111-102. Larry Bird despachó al acérrimo rival con 20 puntos, 12 rebotes, tres asistencias, dos robos y una tapa. Así, se hizo con el primero de sus dos premios de MVP de las finales, además de su segundo titulo NBA.
6-UN NUEVO RÉCORD DE FRANQUICIA (1985)
El récord de 53 puntos de Larry Bird quedó en el pasado en la noche del 3 de marzo de 1985. Kevin McHale despachó a los Detroit Pistons con 56 tantos para la victoria por 138-129. Tras tal suceso, varios periodistas se acercaron a Bird para saber qué pensaba del récord de su compañero. «Tendría que haber conseguido 60 puntos», respondió de manera calma el de Indiana.
Nueve días (12 de marzo de 1985) y cuatro partidos después llegó el porqué de aquella respuesta. Larry Bird no se despeinó para romper el récord que había establecido McHale. Comandó el 124-115 frente a los Atlanta Hawks en New Orleans con 60 puntos. 22/36 de campo y 15/16 de campo, además de un triple en cuatro intentos. La marca se mantuvo como líder desde entonces, aunque Jayson Tatum la igualó el 30 de abril del 2001 con 60 ante los Spurs en Boston.
7-TRES MVPS CONSECUTIVOS (1987)
Larry Bird cuenta con tres premios al MVP de la fase regular, quedando en el sexto lugar de la lista de los máximos acreedores del premio. Posición que comparte con Magic Johnson y Moses Malone. Sin embargo, tiene el detalle de compartir con Wilt Chamberlain (4) un hito único: ganar el premio en tres ocasiones consecutivas.
Tras su estupenda campaña en la 1983-84, también fue el destacado en las dos siguientes. Terminó la 1984-85 con su mejor marca de goleo, una media de 28,7 puntos por noche para ser el segundo en el rubro. Si bien el líder fue Bernard King con 32,9, lo hizo en 55 presentaciones. Además, Larry fue el segundo con mayor cantidad de puntos anotados (2295) por detrás de Michael Jordan (2313), quien tuvo un menor promedió (28,2) por aparición. Además, acompañó el goleo con 10,1 rebotes (9° en la liga), 6,6 asistencias (17°), 1,6 robos y 1,2 tapas en 39,5 minutos por noche.
Boston también fue el mejor equipo de la fase regular (63-19). Dominó el este para llegar a las finales: 3-1 a Cavaliers, 4-2 a Pistons y 4-1 a 76ers. Sin embargo, Los Ángeles Lakers tuvo su venganza en la definición al imponerse por 4-2.
La temporada siguiente, la 1985-86, Boston forjó al mejor equipo de su historia. Una marca de 67-15 que en aquel entonces fue la cuarta mejor de la historia de la liga. Larry Bird fue el líder de aquel elenco imparable con 25,8 puntos, 9,8 rebotes, 6,8 asistencias, 2,0 robos y 0,6 tapas en 38,0 minutos.
8-EL ÚLTIMO TÍTULO DE LA ERA AUERBACH (1986)
Tras una fase regular tan dominante, Boston era probablemente el único candidato al título. El equipo respondió con un paso prácticamente perfecto en la conferencia del este durante los Playoffs. Aplastó a Chicago Bulls (3-0) -pese a la noche en la que Jordan fue Dios-, Atlanta Hawks (4-1) y Milwaukee Bucks (4-0).
Houston Rockets fue el rival de la definición, que la hizo más pareja de lo esperado. El equipo texano ganó dos de sus tres juegos ante su gente para ponerle un poco de intriga a las finales. No obstante, Boston fue superior a su adversario durante todo el año y lo hizo valer en los momentos claves. Se consagró con un 4-2 que le dio el título. Algo que no volvería a hacer hasta en 2008, cuando reunió a Ray Allen, Paul Pierce y Kevin Garnett.
El 8 de junio de 1986 fue el sexto juego de la definición. Houston había achicado a un 3-2 y tenía la posibilidad de forzar un séptimo asalto. Pero Larry Bird le puso un freno a la levantada rival. Selló el 16° campeonato de los Celtics como el tercero de su cuenta personal con un triple-doble. Lideró el 114-97 definitorio con 29 puntos, 12 asistencias y 11 rebotes. Así, redondeó una brillante performance en las finales (24,0 puntos, 9,7 rebotes, 9,5 asistencias y 2,7 robos) para ganar su segundo premio de MVP en una definición.
9-EL ROBO IMPENSADO ANTE LOS DETROIT PISTONS (1987)
Cuando Boston Celtics y Los Ángeles Lakers iniciaron su ocaso, aparecieron varios contendientes a hacerse con ese lugar privilegiado. Uno de ellos fue Detroit Pistons, que llegó a tres finales consecutivas entre 1988 y 1990, imponiéndose en dos de ellas. Los de Michigan tuvieron una cuarta posibilidad en 1987.
Detroit llegó a la final de conferencia tras un 52-30 en fase regular como gracias a triunfos sobre Washington Bullets (3-0) y Atlanta Hawks (4-1). La definición del este fue ante Boston en un cruce muy recordado porque allí fue donde emergió el mote de Bad Boys. El combinado celta ganó los primeros dos juegos ante su gente, su rival respondió con dos en Michigan. Eso dio lugar a un quinto encuentro crucial.
El conjunto de Chuck Daly tuvo la chance de dar el golpe en territorio enemigo. Isiah Thomas le dio la ventaja de 107-106 a la visita con un doble forzado a 17 segundos del final. En la siguiente jugada, Bird penetró a la pintura, pero su tiro fue tapado por Dennis Rodman. En la lucha por el rebote, Rick Mahorn rebotó la pelota contra el cuerpo de Danny Ainge para darle la reposición de costado a Detroit. Así, la visita sólo debía dejar pasar el tiempo y ser efectivo desde la línea de tiros libres para conseguir la ventaja en la serie.
Sin embargo, cuando a Thomas tuvo que reponer la pelota, la serie cambió dramáticamente. El base se apuró y «Larry robó el balón», como replicó el famoso relato. El alero giró su cuerpo antes de salir de la cancha, pasándosela a Dennis Johnson para el doble de la victoria. Aquel triunfo demolió a Detroit, que en el documental de 30×30 de ESPN «The Bad Boys» aceptó que pese a ganar el sexto juego, sabía que había perdido la serie.
Boston luego no tuvo lo suficiente para sortear a Los Ángeles Lakers, que salió campeón con un 4-2. El equipo celta luego tuvo una racha de 21 años sin apariciones en la definición.
10-EL DREAM TEAM (1992)
Tras aquel recordado año en 1987, Larry Bird no volvió a estar en el nivel legendario que supo tener. El alero lidió con problemas en su espalda por el resto de su carrera. De hecho, se perdió prácticamente toda la temporada en la 1988-89 y disputó 105 de los 164 encuentros posibles de fase regular entre 1990 y 1992. Si bien supo mantener un nivel muy alto, siempre por encima de la media de los 19 puntos, 6 rebotes y 5 asistencias, no pudo ser la fuerza dominante de otras épocas. Esto sumado al dominio de Isiah Thomas primero y luego de Michael Jordan dio lugar a su ocaso en la NBA.
Cerró su carrera con los Celtics en la 1991-92, pero se dio la oportunidad para un último baile en los Juegos Olímpicos de Barcelona de 1992. Chuck Daly lo reclutó para el Dream Team en el cual pudo jugar al lado de Magic Johnson, Michael Jordan, Charles Barkley, David Robinson, entre otros. Si bien dudo presentarse por sus problemas físicos, la oportunidad única de compartir plantel con tantas leyendas hizo que la oferta sea irresistible.
De todas las máximas estrellas de aquel plantel, Larry Bird tuvo uno de los papeles menores. Promedió 18 minutos por encuentro para ser el tercero con menor tiempo en cancha, sólo por detrás del universitario Christian Laettner y el lesionado John Stockton. En su tiempo fue rendidor: 8,4 puntos, 3,8 rebotes, 1,8 asistencias y 1,8 robos.
Así, cerró una carrera prácticamente perfecta en lo más alto del mundo. El broche de oro para una trayectoria de Larry Bird que tuvo millones de momentos destacados, y que este fue su Top 10.