Deron Williams, el estelar base de Utah Jazz a fines de la década del 2000, entregó 20 asistencias el 1° de marzo de 2009. Fue durante el triunfo de su equipo ante Golden State Warriors por 112-104.
Sin embargo, aquella noche, D-Will tuvo una espantosa noche con el aro: lanzó 3-12 en tiros de campo y se apoyó en el goleo de Mehmet Okur (23), Ronnie Brewer (21), Paul Millsap (17) y Andrei Kirilenko (13) para que Utah sume su octavo triunfo consecutivo cerca del epílogo de aquella temporada. Con esta victoria, el Jazz de Jerry Sloan había logrado colocarse a dos partidos del líder de la División Noroeste, Denver Nuggets.
Finalizaría la serie regular 2008-09, con localía en el EnergySolutions Arena, con récord de 48-34. Perderían luego ante Los Angeles Lakers en primera ronda cuatro juegos a uno.
“Mi juego ofensivo no se sintió muy bien hoy”, dijo Williams a AP al cierre de aquel encuentro. “Las veces que ataqué el aro recibí tapas de los defensores. Mi tiro en salto tampoco estuvo bien, así que solo traté de distribuir el balón y entregárselo a mis compañeros”.
A veces, cuando la pelota no entra, la solidaridad es la llave contra todos los males. Y Williams lo experimentó en carne propia.
“Querían que entremos en su ritmo y no lo permitimos. Creo que jugamos lo mejor que pudimos cuando logramos correr. Ellos no son un gran equipo en transición defensiva y pudimos explotar este apartado”, completó.
Williams anotó solo seis unidades, pero tuvo 16 asistencias solo en los primeros tres cuartos, igualando su récord de temporada y empatando al plantel completo de los Warriors. Además, fue su cuarto partido de 20 pases-gol.
Por su parte, y con foco en la historia, John Stockton, leyenda del Jazz, tuvo 20 asistencias 35 veces en su carrera, siendo líder absoluto de la franquicia.
A la fecha, además de Stockton y Williams, solo un jugador del Jazz logró un mérito semejante de entregar 20 asistencias: Rickey Green, quien lo hizo una sola vez en toda su carrera.