Hay una ciudad que está deseando a toda costa su regreso a la mejor liga del mundo. Seattle está haciendo todo lo posible para poder retornar a la NBA, luego de que la franquicia se haya mudado a Oklahoma City Thunder en 2008. La lucha por la vuelta es mencionada recurrentemente debido a su rica historia en la competencia.
Dentro de la trayectoria estuvo el campeonato que conquistó Seattle Supersonics, el 1 de junio de 1979. El rival en las Finales fue Washington Bullets, equipo con el cual tuvo una rivalidad conocida en esa época. Es que el conjunto capitalino, comandado por Elvin Hayes y Wes Unseld, le había arrebatado la gloria en las Finales el año anterior por 4 a 3. Por lo tanto, los de la Costa Oeste estaban con sed de revancha.
La temporada 1978-79 arrancó de forma positiva para los Supersonics. El elenco dirigido aquel entonces por Lenny Wilkens tuvo el mejor récord de la fase regular en la División Pacífico, con 52 triunfos y 30 derrotas. Ese equipo estaba liderado por figuras como Gus Williams, Dennis Johnson, Jack Sickma, Paul Silas, entre otros.
En los Playoffs, fueron capaces de eliminar a rivales de primer nivel. En la primera ronda superaron a Los Ángeles Lakers por 4 a 1 y a Phoenix Suns por 4 a 3. De esta manera, Seattle obtuvo su segundo campeonato del Oeste en 12 años de historia. La franquicia había comenzado su camino en la NBA a partir de 1968.
El oponente en las Finales fue el mismo que le dejó un sabor amargo en la campaña 1977-78: Washington Bullets. Elvin Hayes y Wes Unseld guiaron nuevamente a los de DC para quedarse con el título del Este. Así, se rodó un segundo capítulo del enfrentamiento entre ambos equipos en la década de 1970.
Los Bullets arrancaron la serie con una victoria por 99 a 97. Sin embargo, John Johnson, uno de los integrantes de aquel plantel de los Supersonics, dijo una vez: “Desde los últimos ocho minutos del primer partido, sabíamos que los íbamos a vencer”.
Eso fue lo que pasó después. El conjunto de Lenny Wilkens se impuso en los cuatro encuentros siguientes, de forma consecutiva. El último fue el 1 de mayo de 1979, en condición de visitante. En un juego muy parejo, de defensas ásperos, Seattle prevaleció y cosechó el triunfo restante por 97 a 93 con el fin de consumar el 4-1.
“Las defensas siempre derrotan a los ataques. Las ofensivas son como el clima, van y vienen”, afirmó John Johnson, quien finalizó aquel partido con once puntos, cinco rebotes y seis asistencias.
En tanto, el entrenador Lenny Wilkens hizo énfasis en la excelente labor de sus dirigidos en defensa. “Estoy delirando. Sabemos que cuando jugamos bien en defensa, nos impulsa. Estamos orgullosos de nuestra defensiva, y ustedes vieron lo que nos ayudó a lograr”, afirmó.
Por su parte, Dennis Johnson recibió el premio al MVP de las Finales. Su actuación en el quinto juego fue determinante para que su equipo encontrara goleo en un duelo muy cerrado. DJ finalizó con 21 puntos, cuatro rebotes, cinco asistencias, dos recuperos y una tapa.
A su vez, Gus Williams fue el máximo anotador de Seattle con 23 unidades, mientras que Jack Sikma completó un doble-doble (12 y 17 tableros). De esta manera, los Supersonics levantaron el único trofeo Larry O’Brien de su historia. Y un dato llamativo que fue la última vez que un equipo de la División Noroeste salió campeón, lo que generó la sequía más larga en una división en la historia de los deportes estadounidenses.
Además, esas fueron las últimas Finales de Seattle Supersonics hasta 1996. En ese mismo año, la franquicia regresó tras su tercer título de Conferencia, de la mano de Gary Payton y Shawn Kemp.
