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16/06/2022

Campeones NBA: los Golden State Warriors de la 2021-22

El conjunto de San Francisco conquistó su séptimo título, tras completar una dura reconstrucción que le duró dos temporadas.

Golden State Warriors Campeones NBA
Golden State Warriors levantó el trofeo Larry O'Brien tras vencer en las Finales a Boston Celtics por 4 a 2 (FOTOGRAFÍA: gentileza Sports Illustrated).

En las Finales de 2019, Golden State Warriors sufrió dos bajas durísimas. Kevin Durant se desgarró el tendón de Aquiles de la pierna derecha, en el arranque del quinto partido de la serie. Asimismo, Klay Thompson contrajo la rotura de ligamentos cruzados anteriores de la rodilla izquierda durante el sexto enfrentamiento. Esas lesiones provocaron en parte la caída ante Toronto Raptors por 4 a 2.

En la agencia libre, Durant firmó con Brooklyn Nets, poniéndole fin a una etapa de tres torneos en los Warriors. En ese tiempo, el alero llegó a salir campeón en 2017 y 2018, además de haber sido MVP de las Finales en ambas ocasiones. Por otro lado, Klay Thompson acordó su renovación con Golden State por cinco años, pero no llegó a estar presente en la fase regular 2019-20.

A partir de ahí, la franqucia de la Bahía comenzó un proceso de reconstrucción que le costó dos temporadas. De hecho, la vuelta a San Francisco no se concretó de la mejor manera porque el elenco de Steve Kerr fue el equipo con el peor récord de la 2019-20. Concluyó la fase regular con una marca 15 ganados y 50 perdidos. Encima, Stephen Curry se perdió casi todo el certamen, ya que sufrió una fractura en el segundo metacarpo de la mano izquierda.

Las buenas noticias de los Warriors en aquella temporada fueron las incorporaciones de Jordan Poole y Andrew Wiggins. El perimetral llegó a la franquicia después de haber sido seleccionado en el puesto 28 del Draft de 2019. Y su crecimiento se produjo en la campaña 2020-21, debido a que promedió 18,5 puntos y tuvo un 35.1% de efectividad en triples en 19,4 minutos por partido.

Jordan Poole y Andrew Wiggins campeones NBA
Jordan Poole y Andrew Wiggins, dos jugadores claves para la reconstrucción del equipo campeón (FOTOGRAFÍA: gentileza Sports Illustrated).

En tanto, el alero canadiense aterrizó por medio de un traspaso en el que Golden State envió a D’Angelo Russell a Minnesota Timberwolves. A cambio, los de la Bahía recibieron un pick de la primera ronda del Draft de 2021, un pick de segunda ronda y el mismo Wiggins. El número uno del Draft de 2014 llegó después de haber jugado cinco años en el conjunto de Minneapolis. En ese tiempo, fue cuestionado por sus altibajos en el rendimiento, al mismo tiempo de haber firmado una extensión de 148 millones de dólares en cinco torneos.

Pero tomó otro rumbo cuando aterrizó en el elenco de Steve Kerr, porque su registro en la 2020-21 fue de 18,6 unidades (38% de efectividad en tiros externos), 4,9 tableros, 2,4 pases gol y una tapa 33,3 minutos por encuentro. De todos modos, el equipo volvió a quedarse afuera de la postemporada. Es que perdió los dos compromisos del play-in (100-103 ante Los Ángeles Lakers y 112-117 ante Memphis Grizzlies). Una nueva lesión de Klay Thompson (desgarro en el tendón de Aquiles derecho) alteró los planes de la franquicia en aquel certamen.

LA HORA DE LA REDENCIÓN

“No nos querrán ver el próximo año”, manifestó Stephen Curry en la conferencia de prensa, luego de la derrota de Golden State Warriors ante Memphis Grizzlies en el último duelo del play-in de 2021. El base dejó en claro que el equipo estaba preparado para volver a los primeros planos en la campaña 2021-22.

La dirigencia dio en la tecla con los movimientos que llevó a cabo en la agencia libre de 2021. Le extendió el contrato a Curry por cinco temporadas más, tras el cierre del torneo que estaba por arrancar. A su vez, firmó a jugadores claves para reforzar el banco, como Otto Porter Jr, Nemanja Bjelica, Gary Payton II y el regreso de Andre Iguodala, quien formó parte de los títulos de 2015, 2017 y 2018. En tanto, Jonathan Kuminga y Moses Moody fueron los jóvenes que llegaron mediante los puestos siete y catorce del Draft de 2021, respectivamente.

Para la 2021-22, se cumplió el aniversario 75 de la NBA, y por ende el aniversario 75 de los Warriors en la mejor liga del mundo. Por eso, los dirigidos por Steve Kerr quisieron hacer una fiesta inmensa para festejar la longevidad y la grandeza de la franquicia en la competencia. Todos los focos estaban puestos en volver a conquistar el trofeo Larry O’Brien.

El 14 de diciembre de 2021, ocurrió un hecho legendario para la competición. Durante el duelo con New York Knicks, en el Madison Square Garden, Stephen Curry se convirtió en el máximo triplero de todos los tiempos. El número 30 de los Warriors rompió el récord de los 2973 tiros externos convertidos por Ray Allen.

Los hechos memorables de Stephen Curry continuaron en el Juego de las Estrellas de 2022. El domingo 20 de febrero, en Cleveland, estableció la mejor marca de triples en un partido de este evento, con 16 anotaciones. Asimismo, Chef terminó el encuentro con 50 puntos, quedando a dos del mejor registro cosechado por Anthony Davis en 2017.

Además, el 9 de enero se concretó el retorno de Klay Thompson a las canchas. Luego de 941 días de ausencia, el escolta encestó 17 tantos en 20 minutos con el fin de que Golden State venciera a los Cavaliers, de local. También, regaló un volcadón sobre todos los defensores rivales para anunciar oficialmente su vuelta y regresar con la mentalidad de devolver a los Warriors hacia lo más alto de la liga.

Asimismo, Jordan Poole y Andrew Wiggins continuaron con su evolución dentro del sistema de juego implementado por el coach Steve Kerr. El escolta promedió 18,5 puntos y cuatro pases gol por encuentro, y tuvo un 36.4% de efectividad en triples. Mientras que el alero canadiense registró 17,2 unidades (39.3% en tiros externos), 4,5 tableros, 2,2 asistencias y un robo por juego. Por esto, el ex jugador de Minnesota participó por primera vez del All Star Game.

De esta forma, Golden State Warriors culminó la etapa regular con una marca de 53 triunfos y 29 derrotas. Esto lo ubicó en el tercer puesto de la Conferencia Oeste y lo clasificó a los Playoffs. Después de tres años de ausencia, volvió a estar presente en la instancia más atractiva de la NBA.

EL CAMINO EN LA POSTEMPORADA

El elenco de Steve Kerr empezó los Playoffs enfrentándose con Denver Nuggets, que tenía en sus filas al ganador del premio al MVP de 2021 y 2022, Nikola Jokic. Sin embargo, el conjunto de Colorado se vio afectado por las ausencias de Jamal Murray y Michael Porter Jr. Entonces, los de San Francisco se encargaron de superar la primera ronda con un contundente 4 a 1.

En la segunda instancia se cruzaron con un rival muy conocido, Memphis Grizzlies. Los de Tennessee, encabezados por Ja Morant, habían eliminados a los de la Bahía en el play-in de 2021. Por ende, los Warriors se mostraron con sed de revencha en las Semifinales del Oeste.

En el cuarto partido, Stephen Curry se transformó en el primer jugador de la historia en llegar a los 500 triples en Playoffs. Asimismo, Klay Thompson anotó 30 puntos y ocho triples en el sexto enfrentamiento, con el objetivo de concretar la venganza de Golden State sobre Memphis. El triunfo en la serie fue 4 a 2, lo que les permitió avanzar a las Finales de Conferencia.

Enfrente estaban los Dallas Mavericks de Luka Doncic, que venían de sorprender en el séptimo duelo a Phoenix Suns con una aplastante victoria en Arizona. No obstante, los Warriors se encargaron de no sufrir ningún traspie en la serie para asegurar la vuelta a las Finales de la NBA, tras tres años sin jugarlas. Por su parte, Stephen Curry recibió el primer premio de todos los tiempos al MVP de las Finales del Oeste. Para eso, el base promedió 23,8 puntos, 6,6 rebotes y 7,4 asistencias por compromiso.

CRUCE DE EQUIPOS CON TRADICIÓN

Golden State Warriors se enfrentó en las Finales de la NBA con Boston Celtics, un equipo que pasó de tener un récord negativo en la primera mitad de la fase regular a terminar en el segundo puesto del Este. Además, venció en la postemporada rivales de primer nivel, como Brooklyn Nets (de Kevin Durant y Kyrie Irving), Milwaukee Bucks (campeones de 2021) y Miami Heat (de Jimmy Butler, Bam Adebayo, Kyle Lowry y P.J. Tucker).

Fue un choque entre dos franquicias con 75 años de historia en la mejor liga del mundo, en el marco del aniversario 75 de la creación de la competencia. Pero el elenco de Steve Kerr prevaleció ante uno de los elencos con más campeonatos en la competición.

Con una gran producción colectiva, superó a los de Massachusetts por 4 a 2 y levantó el séptimo Larry O’Brien de su historia. También, fue la cuarta conquista del cuarteto compuesto por Stephen Curry, Klay Thompson, Draymond Green y Andre Iguodala.

A su vez, el número 30 del equipo fue seleccionado por primera vez en su carrera como el Jugador Más Valioso de las Finales. Chef se lució a lo largo de la serie con un registro de 31,2 puntos, seis rebotes, cinco asistencias y dos recuperos por aparición. Así, se desquitó del malestar que le ocasionó no haber conseguido el premio en los tres campeonatos anteriores (Andre Iguodala lo ganó en 2015 y Kevin Durant en 2017 y 2018).

“¿Qué van a decir ahora?”, exclamaron los jugadores tras la consagración. Esto se debió a las cuestiones que se hicieron durante sus campeonatos de 2017 y 2018, en los cuales se unieron con Kevin Durant para cosechar ambos títulos.

Golden State Warriors le demostró a todos los seguidores y críticos de la NBA que todavía podían seguir impresionando con su experiencia, oficio y poderío para adjudicarse una nueva estrella. Y esto lo logró tras dos temporadas en las que ni siquiera se presentó a los Playoffs. Un renacimiento perfecto, para una franquicia que supo revitalizar a la mejor dinastía de su historia.

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