Minneapolis Lakers tuvo su era exitosa entre fines de la década de 1940 y principios de la de 1950. Hasta 1953, conquistó cuatro títulos en apenas seis temporadas en la mejor liga del mundo. Hay que recordar que la franquicia se creó en el año 1947, y emprendió su camino en la NBA a partir de la campaña 1947-48.
Asimismo, el equipo contaba con uno de los jugadores más emblemáticos de los primeros tiempos de la competencia. George Mikan se convirtió en una leyenda de los Lakers y de la liga, debido a su capacidad para dominar ampliamente el juego interior. Sin embargo, las lesiones lo obligaron a tomar la decisión de disputar un torneo más, antes de colgar las zapatillas tras el desenlace de la 1953-54.
En el Draft de 1953, la dirigencia seleccionó en el Draft a Clyde Lovellette, un joven centro que ayudó a George Mikan a llevar adelante el certamen, pese a sus problemas físicos. El interno de 24 años, seleccionado en el décimo puesto de la primera ronda, dejó muy buenas sensaciones al complementarse con la leyenda de Minneapolis. Su promedio fue de 8,2 puntos (42.3% de efectividad en tiros de campo) y 5,7 rebotes en 17,4 minutos por encuentro.
Asimismo, George Mikan integró el Mejor Quinteto de la temporada y participó del Juego de las Estrellas. Mr Basketball guió a su equipo hacia el primer puesto de la División del Oeste, con un récord de 46 partidos ganados y 26 perdidos. El centro registró una media de 18,1 unidades, 14,3 tableros y 2,4 pases gol en 32,8 minutos por juego. A su vez, Jim Pollard conformó el Segundo Mejor Quinteto y estuvo presente en el All Star Game tras encestar 11,7, capturar siete y repartir tres por compromiso.
MANTENIENDO LA HEGEMONÍA
Minneapolis Lakers tuvo que enfrentarse con el segundo y el tercer clasificado de la División del Oeste, con el objetivo de poder avanzar a las Finales de la región. Sin embargo, el equipo sostuvo su ritmo de juego y barrió a cada rival para poder ubicarse en las dos instancias más importantes de los Playoffs.
En primer lugar, venció de manera contundente a Rochester Royals por 109 a 88, en condición de local. Luego, superó en ambas ocasiones a Fort Wayne Pistons: el primer duelo por 90 a 85, de visitante, y el segundo por 78 a 73, en casa. Así, barrió en ambos repechajes para clasificarse a las Finales de la División.
El rival volvió a ser Rochester Royals, ya que se repuso de la caída en el repechaje con dos victorias seguidas sobre Fort Wayne Pistons. El equipo contaba como figuras a Bobby Wanzer (15 tantos por juego en la serie), Arnie Risen (14,7) y Jack Coleman (11,7).
De todos modos, el elenco de John Kundla ratificó su superioridad en tres enfrentamientos. A pesar de la derrota fuera de casa (73-74), se impuso en sus dos compromisos de local (89 a 76 en el primer partido y 82 a 72 en el tercero). De esta forma, consiguió el título del Oeste y se clasificó a las Finales de la NBA. Enfrente estaba Syracuse Nationals, que venía de eliminar en las Finales del Este a Boston Celtics por 2 a 0.
EL PASO A LA LEYENDA
El 31 de marzo de 1954, Minneapolis Lakers arrancó las Finales venciendo a Syracuse Nationals por 79 a 68, en casa. Clyde Lovellette (16 puntos, ocho rebotes y un asistencia), George Mikan (15, diez y dos), Slater Martin (13, uno y seis) y Whitey Skoog (11, seis y cinco) fueron los más destacados del equipo anfitrión.
El 3 de abril, Syracuse respondió con una victoria en el segundo enfrentamiento por 62 a 60, de visitante. Wally Osterkorn (20 unidades, 17 tableros y dos pases gol), George King (14, dos y dos) y Paul Seymour (13, tres y tres) se encargaron de empatar la serie por 1 a 1.
De todos modos, el elenco de John Kundla se recuperó 24 horas después con un triunfo en el tercer duelo por 81 a 67, fuera de casa. George Mikan (30 tantos, 15 rebotes y tres asistencias), Vern Mikkelsen (14 y seis) y Slater Martin (diez, uno y siete) lograron que el equipo volviera pasar al frente en el cruce (2-1).
El 8 de abril, los Nationals se redimieron ante su público y se impusieron en el cuarto compromiso por 80 a 69. Paul Seymour (25 unidades, cinco tableros y seis pases gol), Bob Lavoy (14, 11 y cuatro), Billy Kenville (12, dos y tres) y Dolph Schayes (diez, seis y uno) tuvieron grandes actuaciones para volver a igualar las Finales (2-2).
Dos días después, Minneapolis Lakers volvió a tomar el liderazgo en la serie (3-2), con un triunfo a domicilio por 84 a 73. Vern Mikkelsen (21 puntos, diez rebotes y dos asistencias), George Mikan (14, 13 y tres) y Clyde Lovellette (14 y 13) se lucieron en el afán de dejar al equipo a un paso de un hecho sin precedentes.
Luego de 24 horas, Syracuse Nationals ganó el sexto encuentro por 65 a 63, fuera de casa, y forzó un séptimo partido. Paul Seymour (16 unidades), Dolph Schayes (15 y diez tableros) y Billy Kenville (diez) lideraron las ofensivas de la visita para poner el 3 a 3.
Sin embargo, el 12 de abril de 1954, Minneapolis Lakers se hizo fuerte ante su público y se adjudicó el triunfo en el séptimo duelo por 87 a 80. De esta manera, se transformó en el primer equipo de todos los tiempos en conquistar tres campeonatos de manera consecutiva. Además, fue el quinto título en las primeras siete campañas de la franquicia de la NBA. Jim Pollard (21 puntos), Clyde Lovellette (14 y 13 rebotes) y George Mikan (11 y 15) fueron las figuras del dueño de casa en el encuentro decisivo.