El baloncesto a nivel mundial siempre se ha distinguido por la altura de los jugadores, y se suele asociar el ser alto con ser un jugador de basketball. Si eso lo extrapolamos a la mejor liga del mundo, es aún más alevoso como la talla cada vez se hace mayor. Hoy en día, un hombre de dos metros en la NBA es un escolta o un alero. Algunos de los jugadores más altos de la NBA se han convertido en íconos del deporte, e incluso a menudo son considerados amados por los fanáticos. Es por ello, que dentro de una liga donde la altura destaca y mucho, ¿Quiénes sobresalen en la historia de la NBA?
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Mark Eaton (2.25 metros)
Ser alto en el baloncesto casi siempre es útil, y Mark Eaton probablemente estaba bastante contento con su altura de 2.25 metros. A lo largo de su larga carrera en la NBA, el hombre pasó su tiempo con un solo equipo, los Utah Jazz. Gracias a su altura, Eaton era un jugador defensivo increíble. Fue tan bueno que fue incluido en el equipo All-Defensive de la NBA varias veces, e incluso fue nombrado Jugador Defensivo del Año en dos ocasiones distintas. Algunos atribuyen a Eaton el ascenso del Utah Jazz durante su era de juego.
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Sim Bhullar (2.26 metros)
Si bien puede que no sea tan legendario como algunos de los otros hombres más grandes en la historia de la NBA, Sim Bhullar logró impresionar a muchas personas con su altura. Uno de sus mayores reclamos a la fama es que fue el primer jugador indio en la NBA.
Su carrera en la NBA no duró tanto, pero todavía juega baloncesto en Taiwán. Algunos equipos importantes para los que jugó fueron los Sacramento Kings y dos equipos de G-League de la NBA, los Reno Bighorns y los Raptors 905.
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Pavel Podkolzin (2.26 metros)
Si bien la altura de Pavel Podkolzin es sin duda impresionante, los de la NBA no quedaron muy impresionados por el gran hombre ruso. Solo fue parte de la liga durante unos pocos juegos, y saltó de un equipo a otro casi de inmediato. Después de haber sido reclutados por Utah Jazz en el draft de 2004, terminaron intercambiando a Pavel con los Dallas Mavericks casi de inmediato. Solo hizo algunas apariciones antes de que los Mavericks lo despidieran y lo enviaran de regreso a Rusia para continuar con el resto de su carrera.
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Chuck Nevitt (2.26 metros)
La increíble altura no es lo único impresionante de Chuck Nevitt: lo que también es llamativo es la cantidad de grandes equipos en los que jugó. A lo largo de su carrera, estuvo en los Rockets, Lakers, Pistons, Bulls y Spurs. Casi siempre siendo el hombre más grande en la cancha, Nevitt jugó cómodamente en su posición de centro durante aproximadamente nueve años en la NBA. Hasta la fecha, Nevitt es el hombre más alto en ganar el Campeonato de la NBA, algo que sucedió en 1985 con Los Angeles Lakers.
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Yao Ming (2.29 metros)
La estrella del baloncesto chino Yao Ming fue un elemento básico para los Houston Rockets de 2002 a 2011. Si bien nunca ganó un campeonato durante su tiempo en la NBA, eso no impidió que Ming asombrara al mundo. El hombre se convirtió en ocho veces All-Star de la NBA y fue incluido en los equipos All-NBA en cinco ocasiones distintas. Puede que no haya sido el mejor jugador absoluto de la liga durante su tiempo, pero definitivamente fue un contendiente para el MVP cada vez que estuvo en la cancha. Un hombre que revolucionó a la liga y acercó a China y a los Estados Unidos.
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Shawn Bradley (2.29 metros)
Durante más de diez años, Shawn Bradley fue una pieza importante dentro de la NBA. Durante su larga carrera, Bradley jugó de manera destacada para los 76ers de Philadelphia, los Nets de Nueva Jersey (ahora de Brooklyn) y los Mavericks de Dallas. Fue una selección de primera ronda en 1991 y fue reclutado en segundo lugar general, por lo que está claro que el gran hombre estaba destinado a grandes cosas. Si bien nunca terminó con grandes elogios fuera de un equipo All-Rookie, disfrutó de una larga carrera como jugador clave en cada equipo.
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Slavko Vranes (2.29 metros)
Es posible que muchas personas no recuerden el nombre de Slavko Vranes, pero eso se debe a que realmente no estuvo en la NBA durante tanto tiempo. Originalmente seleccionado en la segunda ronda por los New York Knicks en 2003, terminó siendo despedido por el equipo en diciembre. Terminó firmando con los Portland Trailblazers, pero incluso eso fue solo un contrato de 10 días. Solo terminó jugando un solo juego durante el contrato, y después de eso, pasó el resto de su carrera jugando en otras partes del mundo.
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Tacko Fall (2.30 metros)
Técnicamente, Tacko Fall se consideró 2.33 metros durante bastante tiempo, pero después de que la NBA cambió sus estándares de medición, se redujo a 2.30. A pesar de eso, Fall sigue siendo uno de los hombres más altos que no solo ha honrado la NBA, sino también el mundo entero. Recientemente fue readquirido por Cleveland Charge en la G-League de la NBA, pero ha jugado tanto para los Celtics como para los Cavaliers. Si bien no tiene mucha velocidad, Fall lo compensa absolutamente con sus excelentes habilidades de bloqueo.
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Manute Bol (2.31 metros)
Aparentemente, la medida real de la altura de Bol ha sido objeto de debate, ya que se ha enumerado como dos números diferentes a lo largo de los años, pero independientemente de su altura real, sigue siendo uno de los hombres más altos del mundo. Jugando durante los años ochenta y noventa, Bol ha pasado a la historia como uno de los bloqueadores de tiros más impresionantes de la historia de la NBA. Fue tan bueno en su papel defensivo que en realidad tiene más tiros bloqueados que puntos anotados. Pocos pueden aspirar a alcanzar los impresionantes récords de Bol. Actualmente tenemos a su hijo Bol Bol en los Orlando Magic, pero con sus 2.18 metros, no llega a entrar en el ranking.
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Gheorghe Muresan (2.33 metros)
Debido a que en realidad no hay mucho debate sobre su altura, Gheorghe Muresan es, sin duda, el hombre más alto en la historia de la NBA. La mayor parte de su carrera en la NBA transcurrió durante la década de los noventa en la que jugó para los Nets y Wizards. Se ha dicho que Muresan tenía potencial para hacer grandes cosas dentro de la NBA, pero varias lesiones le impedirían pasar a la historia. Afortunadamente, aunque no fue el jugador más increíble, siempre será recordado por su imponente presencia en la cancha.
