Detroit Pistons venía de lograr su primer gran éxito tras superar en las Finales de 1989 a Los Angeles Lakers. Esto les dio la oportunidad de levantar el trofeo Larry O’Brien por primera vez en su historia. Y justo coincidió con su primera temporada en el mítico Palacio de Auburn Hills.
Sin embargo, el conjunto de Michigan se preparó para sostener su era más exitosa en la mejor liga del mundo. Sufrió una sola baja, que fue la de Rick Mahorn a Minnesota Timberwolves. La franquicia tuvo que dejarlo ir como parte del Draft de Expansión, ya que el elenco de Minneapolis empezó ese mismo año su participación en la NBA.
No obstante, el equipo de la Ciudad del Motor conservó a su columna vertebral. Isiah Thomas (18,4 puntos, 3,8 rebotes, 9,4 asistencias y 1,7 recuperos por juego), Joe Dumars (17,8, 2,8 y 4,9) y Dennis Rodman (8,8 y 9,7) fueron convocados al Juego de las Estrellas de 1990, debido a sus notables actuaciones en fase regular.
Asimismo, Dennis Rodman recibió el premio al Mejor Jugador Defensivo del Año e integró el Mejor Quinteto Defensivo, junto con Joe Dumars. Este último venía de ser también el Jugador Más Valioso en las Finales de 1990, luego de la memorable victoria de Deroit sobre los Lakers.
Detroit concluyó la temporada regular en el primer puesto de la Conferencia Este con 59 encuentros ganados y 23 perdidos. Solamente ganó cuatro partidos menos que en la campaña 1988-89, en la cual completó el mejor récord de fase regular de su historia.
MANTENIENDO LA HEGEMONÍA
Detroit Pistons comenzó los Playoffs con una barrida en la primera ronda a Indiana Pacers por 3 a 0. En la segunda instancia, ratificó su superioridad ante uno de los equipos más populares de la liga, New York Knicks. El elenco de Chuck Daly se mostró firme ante la presión de jugar en el Madison Square Garden y consiguió un triunfo contundente por 4 a 1.
El momento esperado llegó en las Finales del Este. Los de Michigan se volvieron a ver las caras en la postemporada con Chicago Bulls, por tercer año consecutivo. La serie inició con dos victorias para el equipo de la Ciudad del Motor, en el Palacio de Auburn Hills. El primer duelo fue por 86 a 77 (20 de mayo) y el segundo, por 102 a 93 (día 22 del mismo mes).
La película se trasladó a Illinois. Los dirigidos por Phil Jackson cumplieron con su trabajo en condición de local para ganar el tercer enfrentamiento por 107 a 102 (26 de mayo) y el cuarto, por 108 a 101 (28 de mayo). Los de la Ciudad del Viento estuvieron más preparados para contrarrestar las Jordan Rules.
Los de Chuck Daly retornaron al Palacio de Auburn Hills para imponerse con su público a favor por 97 a 83, en el quinto partido (30 de mayo). Pero los Bulls volvieron a responder en el Chicago Stadium, con el triunfo por 109 a 81 en el sexto encuentro (1 de junio).
De todos modos, los de Michigan se consolidaron una vez más con la ventaja de localía y aprovecharon la lesión en la espalda de Scottie Pippen. De esta manera, cosecharon una victoria cómoda por 93 a 74 para sentenciar las Finales de Conferencia en el séptimo juego (el 3 de junio). Así, se adjudicaron el tercer campeonato al hilo de la región y avanzaron a las Finales de la NBA.
Enfrente estaba Portland Trail Blazers, que había superado en los Playoffs a Dallas Mavericks (3-0), San Antonio Spurs (4-3) y Phoenix Suns (4-2). Con estos resultados, el conjunto de Oregon obtuvo el título del Oeste y se transformó en el nuevo rival de los Pistons en la instancia más importante de la competencia.
VOLVER A FESTEJAR
El 5 de junio, Detroit Pistons empezó las Finales de la NBA con un triunfo sólido sobre Portland Trail Blazers por 105 a 99, de local. Isiah Thomas (33 puntos, siete rebotes y seis asistencias), Joe Dumars (20) y Bill Laimbeer (11, 15 y dos robos) fueron los más destacados del elenco de Chuck Daly.
Los de Oregon reaccionaron en el segundo compromiso, el día 7 del mismo mes, y empataron la serie con una victoria en tiempo suplementario por 106 a 105. Clyde Drexler (33 unidades), Terry Porter (21, cuatro tableros, diez pases gol y tres recuperos) y Buck Williams (12 y 12) lideraron a los de Rick Adelman.
De todos modos, el conjunto de Michigan se recuperó desde el tercer enfrentamiento, de visitante (10 de junio). Joe Dumars (33 tantos (2-3 detrás del arco)), Isiah Thomas (21, cinco rebotes y ocho asistencias) y Bill Laimbeer (11 y 12) volvieron a ser figuras para un triunfo valioso por 121 a 106. Así, cortó una sequía que llevaba desde 1974 sin poder ganar en Portland.
El 12 de junio, los de Chuck Daly festejaron nuevamente con una victoria en el cuarto duelo por 112 a 109, fuera de casa. Isiah Thomas (32 unidades (4-5 desde el perímetro), cuatro tableros, cinco pases gol y tres robos), Joe Dumars (26) y Bill Laimbeer (12, 12, tres y dos) comandaron los avances de la visita.
Y el 14 de junio se realizó el quinto encuentro, en la cancha de los Trail Blazers. Detroit Pistons cosechó una victoria agónica por 92 a 90, gracias a un tiro ganador Vinnie Johnson. Ahí recibió el apodo de “007”, porque encestó el lanzamiento cuando quedaban 00,7 segundos para el cierre. De esta forma, el equipo concretó la defensa del título y se consagró el bicampeonato de la NBA.
Isiah Thomas recibió por primera vez en su carrera el premio al MVP de las Finales tras registrar en la serie una media de 27,6 puntos, 5,2 rebotes y siete asistencias por partido. Así, Detroit Pistons se transformó en la primera franquicia de todos los tiempos en ganar tres compromisos seguidos de visitante en las Finales de la NBA. Una hazaña ideal para otra estrella más de los “Bad Boys”.
