Desde el año 1957, Boston Celtics comenzó con la seguidilla de diez apariciones consecutivas en las Finales de la NBA. Esta fue la racha más extensa de la historia de la competición. Sin embargo, la franquicia atravesó un período previo en el cual fue uniendo las piezas de a poco, hasta edificar un plantel de primer nivel.
A partir de 1950, Red Auerbach asumió como entrenador en jefe, con el fin de convertir al conjunto de Massachusetts en un elenco protagonista de la mejor liga del mundo. Para ese momento, el certamen llevaba cuatro años de antigüedad y los Celtics habían disputado cada uno de esos torneos. Por otro lado, incorporaron del Draft a Bob Cousy, un base tan inteligente y habilidoso que se lo consideró como un adelantado a su época.
Con Red Auerbach, Boston se clasificó por segunda vez en su historia a los Playoffs de 1951. Anteriormente, la franquicia había estado presente en apenas una de las cuatro postemporadas. Durante seis campañas, no faltó a los Playoffs en ninguna ocasión, lo que indicaba que empezaba a asomar hacia los primeros lugares. Sin embargo, no podía clasificarse a las Finales, por lo tanto la dirigencia entendió que había que patear el tablero.
En la agencia libre de 1956, llegó a un acuerdo con Saint Louis Hawks para enviar a Ed Macauley y a Cliff Hagan. A cambio, recibió el segundo puesto del Draft de ese año, que se terminó transformando en Bill Russell. El arribo del joven interno le dio un potencial que le permitió dar ese salto de calidad que tanto necesitaba el conjunto de Massachusetts. Asimismo, usó el pick terrenal que regía en aquella época para poder incorporar a Tom Heinsohn, quien venía de la Universidad de Holy Cross.
Por eso, los Celtics concluyeron la fase regular en el primer puesto del Este con un registro de 44 partidos ganados y 28 perdidos. También, Bob Cousy recibió el premio al Jugador Más Valioso del torneo e integró el Mejor Quinteto. El base promedió 20,6 puntos, 4,8 rebotes y 7,5 asistencias (mejor marca de la competición) en 36,9 minutos por encuentro. Además, recibió el premio al MVP del Juego de las Estrellas 1957, que se llevó adelante en Boston.
A su vez, Tom Heinsohn obtuvo al galardón al Mejor Novato del Año tras registrar una media de 16,2 unidades, 9,8 tableros y 1,6 pases gol en 29,9 minutos por aparición. Asimismo, Bill Sharman integró el Mejor Quinteto del certamen, al igual que Bob Cousy, debido a que anotó 21,1 (90.5% de efectividad en tiros libres), capturó 4,3 y repartió 3,5 por compromiso.
EL PRIMER PASO
A diferencia de los años anteriores, Boston Celtics pudo evitar las Semifinales de la División del Este. En esta ocasión, se clasificó directamente a las Finales de la región. El contrincante fue Syracuse Nationals, que superó en la primera ronda de los Playoffs a Philadelphia Warriors por 2 a 0.
El oponente contaba con figuras como Dolph Schayes (24,7 tantos y 18,3 rebotes por juego en la serie) y Ed Conlin (15,7). Sin embargo, el elenco de Red Auerbach ratificó su superioridad en el cruce y barrió a Syracuse por 3 a 0. El primer partido lo ganó por 108 a 90, de local, el segundo lo cosechó por 120 a 105, de visitante, y el tercero lo obtuvo por 83 a 80, en casa.
De esta forma, el conjunto de Massachusetts obtuvo el primer título del Este de su historia, y además se clasificó a las Finales de la NBA. El rival fue Saint Louis Hawks, que venía de derrotar en las Finales de la División del Oeste a Minneapolis Lakers por 3 a 0. El equipo contaba con los dos jugadores (Cliff Hagan y Ed Macauley) que le entregó la franquicia, con el fin de quedarse con los servicios de Bill Russell.
EL INICIO DEL ÉXITO
El 30 de marzo de 1957, Boston Celtics arrancó las Finales de la NBA con una derrota ante Saint Louis Hawks por 125 a 123, de local. Bob Pettit (37 puntos y 14 rebotes), Slater Martin (23 y cinco) y Ed Macauley (23, nueve y cuatro asistencias) se encargaron de que la visita diera el primer golpe.
Luego de 24 horas, el elenco de Red Auerbach respondió con un triunfo en el segundo enfrentamiento por 119 a 99, en el Boston Garden. Bob Cousy (22 unidades, siete tableros y siete pases gol), Frank Ramsey (22), Arnie Risen (14 y diez), Tom Heinsohn (14, nueve y cuatro) y Bill Russell (11 y 25) lideraron las ofensivas del anfitrión para empatar 1-1 la serie.
El 6 de abril, Saint Louis se adjudicó el tercer duelo por 100 a 98, en lo que fue el primero de sus dos compromisos seguidos en casa. Bob Pettit (26 tantos y 28 rebotes), Ed Macauley (16 y ocho) y Slater Martin (16, cuatro y cinco asistencias) guiaron al local hacia el 2 a 1 en el cruce.
Un día después, el conjunto de Massachusetts reaccionó y ganó en el cuarto juego por 123 a 118, de visitante. Bob Cousy (31 unidades, cuatro tableros y ocho pases gol), Bill Sharman (24, nueve y cinco), Tom Heinsohn (19 y 14) y Bill Russell (17, 20 y cinco) lograron que Boston volviera a igualar la película (2-2).
El 9 de abril, los Celtics capitalizaron el regreso de la serie al Boston Garden para imponerse en el quinto partido por 124 a 109. Bill Sharman (32 puntos), Tom Heinsohn (23 y ocho rebotes), Bob Cousy (21, ocho y 19 asistencias) y Bill Russell (14 y 23) encabezaron los avances para que el equipo pasara al frente por 3 a 2.
El 11 de abril, los Hawks ganaron el sexto encuentro por 96 a 94, de local, y forzaron el séptimo juego. Bob Pettit (32 unidades, 23 tableros y cinco pases gol), Jack McMahon (17), Jack Coleman (16, 17 y cinco) y Cliff Hagan (16, 20 y cuatro) pusieron el 3-3 y evitaron la caída en casa.
De todos modos, el 13 de abril de 1957, Boston Celtics le puso el fin a la sequía y se fortaleció ante su público con un triunfo en el último enfrentamiento por 125 a 123. Tom Heinsohn (37 puntos y 23 rebotes), Bill Russell (19 y 32), Arnie Risen (16 y diez) y Frank Ramsey (16 y ocho) se lucieron en el encuentro decisivo para estampar el 4 a 3. Así, la franquicia colocó su primera estrella en la vitrina y arrancó una era que estuvo repleta de éxitos y alegrías.
