Desde 2011 hasta 2017, Chris Paul fue el jugador franquicia de Los Ángeles Clippers. En 2012, adquirió una vivienda de lujo en Bel Air, California, a un precio de 8,4 millones de dólares. Así, el base se garantizó una estadía de calidad en una de las ciudades más populares de Estados Unidos.
En 2017, CP3 fue traspasado a Houston Rockets, por lo tanto puso en venta la propiedad a un costo de 8,7 millones de dólares. La casa se construyó en 2003 y llegó a tener como dueña a Avril Lavigne, una cantante icónica del pop, antes de que pasara a manos de la figura de la NBA.
La mansión de Chris Paul tiene una superficie de 3718,5 metros cuadrados. Está compuesta por una inmensa puerta de entrada y un garage enorme que permite el ingreso de hasta diez vehículos. Y un detalle adicional es que se puede usar un ascensor para poder trasladarse hasta cualquiera de los diferentes niveles.
En tanto, la sala de estar principal está conformada por 281,9 metros cuadrados, con un cuarteto de sólidas columnas de estilo toscano y un grupo de puertas de vidrio plegadas en acordeón que conducen a una sala de estar al aire libre.
Tampoco se puede olvidar de la cocina, que tiene un lugar suficiente para poder subdividirse en dos enormes islas centrales, una con un fregadero para verduras y la otra con un snack bar de seis taburetes.
El interior de la casa está compuesto por ocho habitaciones y once baños. Además, está la master suite que contiene una sala de estar privada, una cocina exclusiva, dos spa separados, y vestuarios para hombres y mujeres.
También, la propiedad posee todo tipo de actividades para que el base pueda disfrutar en su tiempo libre, y en familia. Es que hay una sala de teatro con doce asistentos, un área de pool, un sauna, un gimnasio, una librería y una sala de juegos para los hijos. A su vez, tiene una sala de vinos que cuenta con 500 botellas diferentes, con el fin de saborear la amplia variedad.
En cuanto al exterior, la vivienda presenta una piscina, un jacuzzi, una barbacoa cubierta y un espacio de entretenimiento. Todos estos lugares se engloban en un patio trasero con abundante vegetación y un amplio espacio para que la familia disfrute el aire libre y el cálido clima de California.
Chris Paul no solo es un jugador que deleita a los seguidores de la NBA con sus lujosos y quirúrgicos pases, además de su talento para definir en el uno contra uno. Sino que también sabe darse el gusto de brindar una estadía de calidad en cada ciudad del equipo donde juega. Y así, disfrutar de la carrera profesional y del tiempo libre junto con su familia.