Perfiles NBA: Giannis Antetokounmpo, dominador de adversidades

Giannis Antetokounmpo siempre tuvo que superar todo tipo de obstáculos, no solo a nivel deportivo, sino también a nivel personal. Desde su infancia, lidió con conflictos complejos para un chico de su edad, ya que se vio afectado por las trabas que les ponían a sus padres. Sin embargo, desde ese momento demostró que estaba preparado para hacer lo necesario para derribar las barreras. Y así, lo hizo a lo largo de su vida y su carrera deportiva.

Giannis Sina Ugo Adetokunbo nació el 6 de diciembre de 1994 en Atenas, Grecia. Era hijo de padres inmigrantes de Nigeria, que desembarcaron desde Lagos tres años antes del nacimiento de The Greak Freak. En tanto, el hijo mayor, Francis, se quedó en el país del continente africano con los abuelos, debido a que no se podía trasladar con la familia.

Junto con Thanasis, Adetokunbo comenzó a trabajar durante su niñez, siendo vendedor deambulante de relojes, anteojos de sol, entre otros accesorios. Como sus padres tenían dificutades para trabajar, debido a las leyes que regían en Grecia, Giannis se dedicó a realizar todo lo que fuera necesario para ayudar a la familia en un momento muy complicado. La meta era sobrevivir día a día y acompañar a sus padres cuando no eran discriminados por ser inmigrantes nigerianos.

“Como mis papás eran ilegales, no confiaban en nadie. Siempre estaban nerviosos. Un vecino podía decir: “Esta gente está haciendo mucho ruido. Estos chicos están haciendo mucho ruido”. Y la policía venir a golpear la puerta y pedir los papeles, y ahí se terminaba. Era así de simple. Entonces, siempre estabas un poco cerrado. Era de salir cuando me sentía cómodo, pero me llevó 21 años invitar a una chica para que conociera a mis amigos. Yo era cerrado también”, contó The Greak Freak, uno de sus apodos.

A los 13 años, encontró otro oficio que le daría mayores recursos en el futuro. En su adolescencia, arrancó a incursionar en el mundo del básquet y llegó a la conclusión de que podía lograr muchos objetivos en este deporte. Uno de los principales motivos era su impresionante capacidad atlética, que aún podía seguir desarrollando.

En 2011, inició su carrera profesional con tan solo 16 años, ya que firmó un contrato con Filathlitikos, un equipo de la tercera división de Grecia. El ala-pivote estuvo dos temporadas jugando en el básquet europeo. En la primera, logró el ascenso con su club a la segunda división. Esto lo llevó a firmar un contrato de cuatro años con el Zaragoza, aunque no haya llegado a jugar en España.

Adetokunbo siguió una campaña más en el Filathlitikos. Además, sus virtudes descomunales generaron que fuera convocado para el Juego de las Estrellas de la Liga de Grecia en 2013. Cuando estaba por finalizar la temporada, pudo conseguir la Ciudadanía de Grecia después de tantos años de esfuerzo, trabajo y fortaleza. A partir de ahí, cambió su nombre y apellido a Giannis Antetokounmpo. Sus esperanzas se hicieron realidad, cumplió con los trámites correspondientes y obtuvo un pasaje a un hecho impensado cuando vivió esa dura infancia.

LA LLEGADA A LA NBA

Giannis Antetokounmpo fue seleccionado por Milwaukee Bucks en el Draft de 2013, en el puesto 15. La franquicia de Wisconsin confió en él después de dar a entender que iniciaba un proceso de reconstrucción. La era Brandon Jennings había terminado con una clasificación a Playoffs en el octavo lugar del Este. Entonces, la dirigencia decidió traspasarlo a Detroit Pistons por el joven Khris Middleton. Y así, buscar que la dupla encuentre la química de juego desde el amanecer de sus carreras.

El General Manager, John Hammond, explicó el motivo por el cual eligió al griego. “No hay duda de que hubo selecciones más seguras, pero nada con este tipo de ventajas, nada parecido a esto. ¿Cómo vamos a conseguir nuestro próximo All-Star? No quiero poner eso en el hombro de este niño, pero creo que tiene ese conjunto de habilidades para convertirse en eso, si todo encaja para él”, aclaró cuando lo seleccionó.

El debut oficial de The Greak Freak en la NBA fue el 30 de octubre de 2013, con tan solo 18 años y 318 días. Así, se convirtió entre los 18 jugadores más jóvenes de la historia en arrancar su carrera en la mejor liga del mundo. En esa ocasión, jugó apenas 4m43s en el Madison Square Garden, el estadio más popular de la competencia y la casa de New York Knicks.

En su primera temporada, llegó a disputar el Rookie Challenge de 2014, en New Orleans. Este desafío es uno de los partidos que conforman el All Star Weekend (Fin de Semana del Juego de las Estrellas). Además, terminó integrando el Segundo Mejor Quinteto de Novatos en el torneo, tras promediar 6,8 puntos, 4,4 rebotes y 1,9 asistencias en 24,6 minutos por partido.

El ala-pivote contó con un nuevo entrenador para la 2014-15, Jason Kidd. El joven entrenador, quien venía de dirigir a Brooklyn Nets y de tener una exitosa carrera como jugador, se encargó de acompañarlo desde la segunda campaña de su carrera. Desde ese momento, el número 34 de Milwaukee Bucks comenzó a tener un notable crecimiento en lo deportivo.

Su promedio en la fase regular fue de 12,7 unidades, 6,7 tableros, 2,6 pases gol y un bloqueo en 31,4 minutos por encuentro. También, llegó a participar del Concurso de Volcadas en el All Star Weekend de 2015, en el Barclays Center. Y encima, ayudó a que el conjunto de Wisconsin regresara a los Playoffs con un récord de 41 juegos ganados y 41 perdidos. No obstante, perdió en la primera ronda con Chicago Bulls por 4 a 2.

En la 2015-16, el coach Jason Kidd tomó la decisión de que Giannis Antetokounmpo fuera el base titular del equipo. “Vamos a probar con él manejando el balón. Podés llamarlo armador, alero, centro. Con él teniendo el balón y la presión que ejerce sobre la defensa y su habilidad para encontrar muchachos, ha sido una ventaja para nosotros”, explicó en su momento el DT.

El griego continuó con su evolución, pese al cambio de posición. Su registro en el tercer torneo fue de 16,9 tantos, 7,7 rebotes, 4,3 asistencias, 1,2 recuperos y 1,4 tapas en 35,3 minutos por aparición. “Cuando era más joven, jugaba (de base) en Grecia, pero nunca jugué acá a acá. Día a día, me siento más cómodo. Solo trato de dar lo mejor de mí, y lo que sea que el entrenador me pida que haga. Cualquier cosa que mi entrenador diga que haga es lo que haré. Si esta es la última vez que juego en la posición de armador, entonces está bien. Cualquier cosa que el entrenador quiera que haga”, comentó el referente de los Bucks sobre el experimento.

Milwaukee no clasificó a la postemporada de 2016, pero sí lo hizo en la de 2017. Justo ocurrió cuando The Greak Freak regresó a su posición natural y dio el salto de calidad. Su promedio en la 2016-17 fue de 22,9 unidades, 8,8 tableros, 5,4 pases gol, 1,6 recuperos y 1,9 bloqueos en 35,6 minutos por compromiso. Con estos números, convenció a todos los seguidores de que lo votaran para luego obtener el premio al Jugador Con Mayor Progreso del Año. Asimismo, participó por primera vez en su carrera del Juego de las Estrellas, que se realizó en 2017 en New Orleans.

El conjunto de Wisconsin culminó en el sexto puesto del Este con una marca de 42 triunfos y 40 derrotas. La franquicia no cosechaba un registro positivo en fase regular desde 2010. Sin embargo, cayó en la primera ronda ante Toronto Raptors por 4 a 2, aunque había iniciado la serie con una victoria en condición de visitante.

En la 2017-18, Giannis Antetokounmpo comenzó la extensión de contrato, equivalente a una suma de 100 millones de dólares en cuatro temporadas. El certamen fue difícil porque la dirigencia despidió al entrenador Jason Kidd tras un arranque muy irregular. Con Joe Prunty como interino, el equipo se reacomodó y finalizó en el quinto lugar de la Conferencia con una marca de 44-38. También, se realizó un traspaso fuerte a mitad de la etapa regular, ya que hicieron un intercambio con Phoenix Suns para que llegara Eric Bledsoe.

The Greak Freak siguió desarrollando sus habilidades en la quinta temporada de su carrera. Llegó a promediar 26,9 unidades, diez rebotes, 5,4 pases gol, 1,6 robos y 1,9 tapas en 36,7 minutos por duelo. También, volvió a estar presente en el All Star Game, que se llevó a cabo en 2018 en Los Ángeles. No obstante, volvió a quedarse eliminado en la primera ronda de Playoffs, esta vez ante Boston Celtics por 4 a 3.

LA BÚSQUEDA DE LA GLORIA

Milwaukee decidió contratar a Mike Budenholzer para la 2018-19. El coach venía de dirigir a Atlanta Hawks, donde logró el mejor récord de la historia de la franquicia en la fase regular de la 2014-15. Asimismo, fue asistente de Gregg Popovich, el legendario entrenador de San Antonio. El motivo de la elección fue más que claro: llevar a los Bucks hacia una conquista del trofeo Larry O’Brien.

En cuestión de un torneo, el conjunto de Wisconsin pasó a tener la defensa más sólida de la competición. Y así, logró el primer lugar del Este en la fase regular, con el mejor récord de todo el certamen (60 triunfos y 22 derrotas). Por otro lado, Giannis quedó por primera vez como uno de los dos capitanes (junto con Stephen Curry) en el Juego de las Estrellas, que se llevó adelante en 2019 en Charlotte.

Además, anotó 41 tantos en el cuarto juego de la primera ronda para completar la barrida a Detroit Pistons y clasificar por primera vez a las Semifinales de Conferencia. Así, quebró una sequía de 18 años sin que la franquicia ganara una serie de Playoffs. En la segunda ronda, su equipo derrotó a Boston Celtics por 4 a 1, luego de haber perdido el primer enfrentamiento de la serie. Pero perdió en las Finales de la región con Toronto Raptors por 4 a 2.

Más tarde, se transformó en el tercer jugador más joven de todos los tiempos en recibir el premio al Jugador Más Valioso del año, solamente por detrás de Derrick Rose y LeBron James. Para eso, terminó con un registro de 27,7 puntos, 12,5 tableros, 5,9 asistencias, 1,3 recuperos y 1,5 tapas en 32,8 minutos por juego.

Milwaukee volvió a estar en lo más alto de la fase regular en la 2019-20. Concluyó como el líder del Este con una marca de 56 partidos ganados y 17 perdidos. Por su parte, The Greak Freak volvió a ser uno de los dos capitanes (a la par de LeBron James) del All Star Game, que se llevó a cabo en 2020 en Chicago.

A su vez, Antetokounmpo obtuvo dos premios en el mismo certamen, como al Mejor Defensor y al Jugador Más Valioso del Año. Fue el tercero de todos los tiempos en conseguir dos hitos individuales, después de Michael Jordan y Hakeem Olajuwon. El europeo cosechó su segundo premio al MVP tras registrar 29,5 tantos, 13,6 rebotes, 5,6 pases gol, un robo y un bloqueo en 30,4 minutos por encuentro.

Los Playoffs de 2020 se realizaron en una burbuja que se estableció en el Complejo de ESPN, en World Disney Resort. A raíz de la pandemia mundial por el COVID-19, la NBA tuvo que organizar el desenlace de la 2019-20 en una sede única y sin público. Los Bucks iniciaron la postemporada con una victoria en la primera ronda sobre Orlando Magic por 4 a 1. No obstante, cayeron en la segunda instancia ante Miami Heat por 4 a 1.

EL MOMENTO MÁS LEGENDARIO

La 2020-21 era la última campaña del contrato que había firmado Giannis Antetokounmpo con la franquicia, en 2016. Entonces, el General Manager de aquel año, Jon Horst, realizó un intercambio a tres bandas que catapultó al equipo hacia la candidatura por el campeonato. Dejó ir a Eric Bledsoe (New Orleans Pelicans), George Hill (Oklahoma City Thunder) y cuatro picks de primera ronda del Draft para traer a Jrue Holiday.

Así, se estableció un nuevo Big Three que estuvo compuesto por Antetokounmpo, Middleton y Holiday. Asimismo, se rodearon de otros complementos de buen nivel, como Brook Lopez, Donte DiVincenzo, Bobby Portis, Pat Connaughton, Bryn Forbes y Jeff Teague.

El conjunto de Wisconsin culminó la etapa regular en el tercer puesto de la Conferencia, con una marca de 46-26. Bajó dos peldaños con respecto a las fases de los años anteriores. No obstante, se guardó lo mejor para la postemporada, empezando por una barrida por 4 a 0 ante Miami Heat. Los de Florida los habían eliminado en el 2020, por lo tanto Milwaukee se cobró su venganza.

En la segunda ronda se cruzaron con los Brooklyn Nets de Kyrie Irving, James Harden y Kevin Durant. Los neoyorquinos se postularon como favoritos a ganar la serie. Pero ocurrieron hechos accidentales, como las lesiones de Irving y Harden. De todos modos, los Bucks demostraron en ese momento que estaban preparados para ser candidatos serios. Entonces, ganaron por 4 a 3 y se clasificaron a las Finales de la región. Otro acontecimiento fortuito fue la conversión de Kevin Durant en los últimos segundos del cuarto período del séptimo juego. Como estaba pisando la línea de triple, se le contabilizó como doble y la historia se decidió en tiempo suplementario.

El rival siguiente fue Atlanta Hawks, que estaba siendo liderado por un joven llamado Trae Young. El base se encargo de dejar en el camino a New York Knicks y Philadelphia 76ers. Además, sorprendió a los de Wisconsin con una victoria en el Fiserv Forum, en el primer partido de las Finales de la región. Otra situación alarmante fue la lesión de Giannis Antetokounmpo en el cuarto duelo. En un aterrizaje con Clint Capela, sufrió una hiperextensión de la rodilla izquierda. De todas maneras, no sufrió ninguna fractura y solo se perdió el resto de la serie.

The Greak Freak retornó a las Finales de la NBA, después de que su equipo consiguiera el triunfo sobre Atlanta por 4 a 2. Khris Middleton y Jrue Holiday tomaron la batuta en los momentos claves y le dieron al elenco de Mike Budenholzer el título del Este. Enfrente estaba Phoenix Suns, que superó en el Oeste a Los Ángeles Lakers, Denver Nuggets y Los Ángeles Clippers.

La dupla conformada por Chris Paul y Devin Booker se mostró más letal en los primeros dos partidos, en Arizona. Pero el ala-pivote griego regresó a las canchas durante la serie y se hizo notar en los siguientes enfrentamientos. Los Bucks se impusieron en el tercer y cuarto enfrentamiento, de local. El quinto duelo fue trascendental. Phoenix volvió a arrancar fuerte con el público a su favor y empezó sacando una máxima diferencia de 17 tantos. No obstante, Milwaukee se recuperó y liquidó la historia con un robo de Holiday a Booker y el alley-oop a Antetokoumpo.

En el sexto juego, Giannis Antetokounmpo hizo historia a la hora de sellar el asunto. Es que terminó ese partido con 50 puntos, 14 rebotes y cinco tapones en el triunfo sobre los Suns, ante sus fans. Esta producción individual no se vio en las Finales desde Bob Cousy en 1958. De esta forma, el oriundo de Atenas se convirtió en el Dios que se metió en el Olimpo de la NBA tras completar un hecho legendario. Y también, de darle a Milwaukee el primer campeonato desde 1971. Luego, recibió el premio al MVP de las Finales tras registrar en la serie una media de 35,2 unidades, 13,2 tableros, cinco asistencias, 1,2 recuperos y 1,8 bloqueos por aparición.

LA HISTORIA CONTINÚA

En la 2021-22, Giannis Antetokounmpo comenzó una nueva extensión de contrato con los Bucks, equivalente a un total de 228 millones de dólares en cinco campañas. Así, reflejó la fidelidad que prometió que iba a tener con la franquicia desde que aterrizó en la NBA. A su vez, se aseguró un tiempo más compitiendo por los primeros lugares con el elenco de Mike Budenholzer. Es que se mantuvieron jugadores importantes como Jrue Holiday, Khris Middleton, Brook Lopez, Bobby Portis, Pat Connaughton, entre otros.

Al mismo tiempo, en la jornada inaugural de esa campaña 2021-22, el martes 19 de octubre, la mejor liga del mundo anunció a los mejores 75 jugadores de todos los tiempos. Y The Greak Freak quedó incluido en esa lista, como producto de su constante sacrificio, esfuerzo y compromiso en búsqueda de la grandeza.

Si bien le queda camino por recorrer, ya consiguió hitos memorables para estar en la gran lista de la competición. En sus diez años de carrera, fue campeón de la NBA en 2021, MVP de las Finales de ese mismo año, ganó dos premios al Jugador Más Valioso del año (2019 y 2020), integró cuatro veces el Mejor Quinteto (2019 a 2022), dos veces el Segundo Mejor Quinteto (2017 y 2018), fue elegido el Mejor Defensor del Año en 2020, estuvo presente cuatro veces en el Mejor Quinteto Defensivo (2019 a 2022) y participó de seis ediciones del All Star Game (2017 a 2022, MVP en 2021).