El 29 de noviembre de 2015, Kobe Bryant escribió una carta para The Players’ Tribune que la tituló “Dear Basketball”. “Un amor tan profundo que te di mi todo/De mi mente y cuerpo/A mi espíritu y alma. Esta temporada es todo lo que me queda para dar./Mi corazón puede soportar los latidos/Mi mente puede manejar la rutina/Pero mi cuerpo sabe que es hora de decir adiós./Y está bien./Estoy listo para dejarte ir”, escribió.
Así, el astro de Los Ángeles Lakers le puso fin a una carrera de 20 temporadas, todas la camiseta púrpura y oro. Su extensa estadía en Hollywood fue el premio a los cinco campeonatos conquistados con la franquicia californiana en 2000, 2001, 2002, 2009 y 2010. Además, recibió dos premios al MVP de las Finales (2009 y 2010), un trofeo al Jugador Más Valioso del Año (2008), dos veces scoring champ (2006 y 2007), entre otros premios.
Durante la campaña 2015-16, The Black Mamba recibió saludos en cada estadio donde fue a jugar. Inclusive la de Boston Celtics, el rival de toda la historia de los Lakers y por ende de Kobe Bean. La actuación del equipo en la fase regular quedó a un segundo plano, aunque haya terminado con un flojo récord de 17 triunfos y 65 derrotas. El certamen significó la oportunidad para que todos los protagonistas de la mejor liga del mundo le agradecieran y ovacionaran al ícono del conjunto angelino.
ÚLTIMA PRODUCCIÓN LEGENDARIA
El 13 de abril de 2016, Kobe Bryant jugó su último encuentro en la NBA. En el Staples Center, los dirigidos en aquel entonces por Byron Scott recibieron a Utah Jazz. Dos números se estamparon en el parquet: la “8” y la “24”. Esto se hizo en honor a las camisetas que utilizó la Mamba Negra a lo largo de su carrera.
La fiesta fue completa, ya que el escolta se destacó con 60 puntos en la remontada ante el conjunto de Salt Lake City. De hecho, anotó 23 unidades en los 12 minutos finales, con el fin de revertir el marcador adverso. Los Lakers ganaron por 101 a 96, pero lo que más importó fue el memorable espectáculo que brindó Kobe Bean, antes de colgar las zapatillas.
En esa jornada, se transformó en el jugador más viejo en completar un partido con dicha cantidad de tantos. Y eso que en la misma noche, Golden State Warriors superó a Memphis Grizzlies para establecer el mejor récord de fase regular de todos los tiempos (73 victorias y nueve caídas). Pero todos los focos estuvieron puestos en Kobe Bryant, quien le ponía un punto final a una aventura ejemplar. De hecho, ESPN ubicó el duelo de los californianos en su canal principal, dejando a los de la Bahía en una señal secundaria.
Luego del partido, el oriundo de Pensilvania tomó el micrófono y brindó un discurso emotivo para los espectadores en el Staples Center. “Es difícil creer que sucedió de esta manera. Todavía estoy en estado de shock por eso. El final perfecto hubiera sido un campeonato. Pero esta noche (yo) estaba tratando de salir, jugar duro y tratar de dar un espectáculo lo más posible. Me sentí bien de poder hacer eso por última vez. Creo que la parte más importante es que todos nos mantuvimos juntos todo el tiempo. Siempre estarán en mi corazón, y lo aprecio sinceramente, sinceramente. Gracias desde el fondo de mi corazón. Los amo chicos”, afirmó Bryant.
Y para cerrar la histórica ceremonia, The Black Mamba manifestó: “¿Qué más puedo decir? Mamba out”. Tiró un beso hacia las gradas y apoyó el micrófono en el centro del estadio. De esta forma, regaló una frase histórica para bajar el telón a una noche inolvidable, como celebración de su emblemática carrera en la mejor liga del mundo.